
El gobernador cordobés Juan Schiaretti participó de dos encuentros clave: protagonizó la “mesa antigrieta” en casa de Urtubey, con la presencia de Frigerio, e impulsó el cónclave con de 12 gobernadores peronistas, sin Bordet, críticos de Alberto Fernández.
En la previa del cónclave del Consejo Federal de Inversiones (CFI), que tiene como objetivo de empoderar al interior y presionar sobre el centralismo porteño y que se consumará este martes -ya comprometieron su presencia 19 mandatarios provinciales- Schiaretti participó de manera presencial de la mesa antigrieta y virtual de la reunión de gobernadores peronistas.
Bordet no participó de la reunión con sus pares peronistas a espaldas de la Casa Rosada.
Los 12 gobernadores peronistas concertaron una reunión donde mostraron su preocupación por la situación que atraviesa el país y coincidieron en cuatro puntos que elevarían al Presidente Alberto Fernández en el encuentro formal del CFI.
Según consigna Lapoliticaonline, la reunión de mandatarios del PJ estuvo motorizada por losgobernadores kirchneristas AxelKicillof, Gildo Insfrán, Jorge Capitanich y Gerardo Zamora.
La convocatoria fue importante ya que sumó a otros ocho pares provinciales, donde fuentes al tanto delencuentro agregaron que creían Cristina Kirchner noestaba enterada.
El encuentro se produjo después que los gobernadores fueran a la Casa Rosada a reunirse con el ministro del Interior, Wado de Pedro, que los convocó para discutir sobre la pelea por la coparticipación que el Gobierno tiene con Rodríguez Larreta.
La cumbre se gestó para tratar de coordinar una respuesta frente a la crisis en la que está metido el Gobierno y analizar cuál será el escenario una vez que se empiece a implementar el ajuste acordado con el FMI.
La introducción estuvo a cargo deCapitanich, que explicó cómo iba a impactar en las provincias la falta dePresupuesto y su reemplazo por un DNU que está redactando Guzmán y quecontendrá el ajuste acordado con el Fondo. Eso es uno de los puntos que máspreocupa a los gobernadores.
Entre los presentes además de los mencionados estuvieron el pampeano Sergio Ziliotto, el sanjuanino Sergio Uñac, el chubutense Mario Arcioni, el catamarqueño Raúl Jalil, el santafesino Omar Perotti, la santacruceña Alicia Kirchner y el misionero Oscar Herrera Aguad. Tras enterarse del cónclave, Manzur llamó al riojano Ricardo Quintela para recriminarle.
En el debate se conformó una agenda de exigencias para llevarle al Presidente y se acordó que seanCapitanich e Insfrán los encargados de reunirse con Alberto para transmitirlela posición del grupo. Luego de un largo debate se acordaron cuatro puntoscentrales.
Los 4 puntos que plantean alPresidente
1. Rearmar el gabinete;
2. Definir un programaantiinflacionario;
3. Dejar establecido en el DNU delPresupuesto 2022 las obras públicas en las provincias;
4. Armar la mesa política delFrente de Todos.
Sin Bordet
El mandatario entrerrianoGustavo Bordet y su par tucumano José Jaldo, los peronistas más cercanos aAlberto Fernández, no participaron de la reunión que se concretó sin avisarle al jefe de Gabinete,Juan Manzur, que se supone es el nexo de la Casa Rosada con los gobernadoresdel PJ.
La situación de Bordet también exponeque pese a que se ha retratado con Frigerio, que le valió críticas dentro delperonismo, en este caso prevaleció su afinidad con el Presidente el no haberasistido a la reunión de sus pares en contra de Alberto.
El grupo de gobernadores tenía previsto un nuevo encuentro este lunes pero la Casa Rosada se enteró. Entonces, Alberto llamó uno por uno a todos los gobernadores para pedirles que no vayan y sólo evitó dos llamados: Schiaretti y Capitanich.
El Presidente, señalan, evitó llamarlos ya que considera que eran los encargados de armar el segundo encuentro, donde se iba a sumar el cordobés.
Ambos se reunieron la semana pasada para conversar a solas en las oficinas del cordobés y representan los extremos de su universo: Schiaretti por momentos bordea a Juntos y Capitanich es acaso el kirchnerista más convencido.
El cordobés está adquiriendo una centralidad importante en la medida que se agranda la crisis. Decano de sus pares es el único gobernador “anfibio”, que se transita con la misma soltura encuentros con sus pares del peronismo como de Juntos por el Cambio.
Schiaretti apuró la cumbre de “moderados” porque prevé una crisis extrema y busca armar una red de contención.
De hecho, luego de la cumbre del CFI armó otro encuentro de opositores moderados donde estuvo Rogelio Frigerio y asistieron los radicales Gerardo Morales y Ángel Rozas y los peronistas no oficialistas Florencio Randazzo, Graciela Camaño, y Emilio Monzó, entre otros.