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a vuelta de Enrrique Cresto a la intendencia de Concordia marcará el final de la gestión de Alfredo Francolini en el cargo, luego de casi tres años.

El lunes 3 de octubre se realizará el traspaso de mando y quien hoy es la máxima autoridad del Ejecutivo concordiense regresará a la presidencia del Concejo Deliberante.

En este marco, Francoloni se refirió a la vuelta de Cresto, algo que estaba acordado desde que pidió licencia en enero del 2020 para asumir como administrador de Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento (ENOHSA), aunque aclaró que no se había determinado la fecha.

"Desde el día que se fue Enrique, nosotros sabíamos que iba a volver porque así lo venía manifestando, Enrique me había dicho que tres meses antes de volver me iba a avisar y por ahí no fueron así los tiempos, pero no importa”, reveló.

Y añadió: "Con Enrique tenemos muy buena relación, con él no tengo ningún problema, no hablamos mucho, pero sí lo hacemos cuando tenemos que hablar y seguramente nos estaremos juntando antes de que reasuma el lunes”.

Posteriormente, hizo un breve análisis de su labor al frente de la municipalidad, y expresó: “Van a ser casi mil días, casi tres años de gobierno hasta el lunes que viene. Hemos pasado por distintas etapas".

"La primera de esas etapas fue hacerme cargo de una pandemia en la cual tuvimos que tomar medidas consensuadas dentro del Comité de Emergencias y cuyos resultados, uno nunca quiere enfrentar algo así, fue como esperábamos”, explicó.

Consultado por el medio El Sol, sobre si habrá una despedida cuando deje el puesto de intendente, Francolini anticipó: "No, uno se despide de un cargo cuando piensa que no volverá y yo aspiro a volver a ejercer este cargo, para lo cual me someteré a la consideración de los concordienses".

Esto en referencia a los comicios del 2023, donde ya avisó que se presentará a pelear la interna del PJ con el objetivo de conducir nuevamente la ciudad, pero esta vez, encabezando la boleta. "La gente es quien tiene que evaluar mi desempeño como intendente en estos 1.000 días de gobierno, con la pandemia encima, y no me corresponde a mí decir que lo hice bien", manifestó.

Y agregó: "Pero si estoy casi obligado a decir que lo hice con total responsabilidad y que puse empeño y pasión para llevar adelante el gobierno municipal".

Para concluir, apuntó: "Por esto digo que son los administrados quienes deben decir si estuve a la altura de las circunstancias o no”.