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as idas y vueltas entre el gobierno de Entre Ríos y los gremios docentes, en el marco de las negociaciones paritarias, no cesan.

Desde el inicio del año el Ejecutivo provincial viene realizando propuestas con el fin de adecuar el salario de los trabajadores a la situación económica del momento, en consonancia con el compromiso del gobernador Gustavo Bordet de mantener los sueldos por encima de la inflación.

Estas ofertas han sido consideradas por los dirigentes gremiales como insuficientes, y consecuentemente rachazadas, algo que, de a poco, fue tensando la relación entre las partes, y lo que había comenzado como un diálogo sereno y en busca de un consenso, fue subiendo el tono, sobre todo en las últimas horas.

Así lo demostraron las declaraciones de funcionarios de la provincia y representantes de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (AGMER) luego del paro realizado el viernes pasado.

De ambos lados hubo fuertes palabras, y la polémica continúa un día después, cuando se intenta saber cuál fue el nivel de acatamiento de la media de fuerza por parte de los docentes.

Por un lado, el Consejo General de Educación (CGE) aseguró que se registró un 60% de presentismo en las escuelas de la provincia, es decir, que más de la mitad de los trabajadores no se adhirieron a la medida determinada por el gremio.

Esos números obedecen al relevamiento llevado a cabo por el organismo, a través de las 17 direcciones departamentales de escuelas, y fueron replicados por Bordet, quien expresó: "Felicito a todos los docentes que fueron a trabajar y están comprometidos con la educación pública”.

No obstante, AGMER dio a conocer otras cifras, asegurando que cerca del 95% de los docentes, a nivel primario y secundario, se plegaron al paro.

Según consignan desde el gremio, así lo estableció el relevamiento propio que hicieron en las distintas escuelas.

Más allá de las contradicciones entre los números presentados de un lado y del otro, queda a resolver un tema muy importante, ya que la normativa vigente del CGE, establece liquidar únicamente los días trabajados, excepto cualquier inasistencia dentro del régimen de licencias, por lo cual, resta saber si el gobierno le descontará la ausencia por el paro al 40% o al 95% de los docentes.