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a Corte Suprema de Justicia de la Nación (CSJN) falló en favor de la Ciudad de Buenos Aires (CABA) y ordenó que se le otorguen más de 180 mil millones de pesos adicionales a los que ya percibe en concepto de coparticipación.

En ese marco, el presidente Alberto Fernández anunció, no sólo que no acataría la sentencia, sino que también recusaría a los miembros el Alto Cuerpo y pediría que se revoque el veredicto.

Estas decisiones fueron tomadas por el máximo mandatario nacional luego de reunirse con gobernadores justicialistas, y generaron todo tipo de reacción en el arco político.

En Entre Ríos, dirigentes, legisladores y referentes de la oposición criticaron fuertemente la postura de Fernández, mientras que desde el oficialismo cuestionaron la decisión de la corte y a los opositores, argumentando que defendían un fallo que perjudicaba a la provincia.

Si embargo, el titular del Ejecutivo nacional cambio de idea y confirmó que le transferirá a CABA los fondos coparticipables que surgen de la medida cautelar de la CSJN.

A diferencia de lo ocurrido con el anterior anuncio, la nueva determinación del presidente no tuvo demasiado eco en la dirigencia política de ningún sector.

No hubo comunicados oficiales difundidos por las fuerzas ni por los bloques de diputados o senadores provinciales, como sí ocurrió en un primer momento, cuando AF dijo que no acataría el fallo.

Tampoco en las redes sociales personales de los actores de la política entrerriana se pudieron captar ecos de la flamante determinación del funcionario, al menos, no de manera inmediata.

Resta saber si con el correr de las horas, desde el Frente de Todos o Juntos por el Cambio deciden pronunciarse sobre la marcha atrás del presidente ante.