
La inflación en marzo registró un incremento del 6,7%mensual, según el informe del INDEC, por lo que, en el primer trimestre delaño, los precios subieron un 16,1%, la marca más alta desde 1991, periodo en elque Argentina comenzaba a salir de la hiperinflación.
En este marco, desde el gobierno nacional anunciaron que, porel momento, esta tendencia no va a modificarse, e incluso, los precios treparánaún más.
Así lo confirmó ministro de Desarrollo Productivo, MatíasKulfas, quien señaló: “La inflación de abril no viene bien. No esperamosuna baja pronunciada, eso ocurrirá en mayo”, al tiempo que sostuvo: “Desde haceun rato largo me preocupa la inflación. Es un problema que lleva 15 años”.
Posteriormente, el funcionario se refirió a su vínculo con elsecretario de Comercio, Roberto Feletti, quien es el encargado de intentarcontener la escalada de precios, y señaló: “Tenemos una buena relación, podemosdiscutir cuestiones de estilo, pero no tenemos problemas en trabajar en lo quehemos establecido”
El titular de la cartera productiva también habló sobreAlberto Fernández y dijo: “El Presidente considera que este es el rumboeconómico. Puede haber matices, pero no podemos alejarnos de ahí porque a lavuelta están los que quieren volver a la Patria financiera”.

Matías Kulfas, ministro de Desarrollo Productivo de laRepública Argentina.
“Mi cabeza y la de todo mi equipo de trabajo está metida enlas políticas activas de la industria argentina. Estamos obsesionados en quelas pymes puedan cumplir sus proyectos”, agregó.
Kulfas se refirió también a la interna que se vive dentro delFrente de Todos, aunque prefirió evitar polémicas y expresó: La única obsesióndel Gobierno es la reactivación económica. Hablar de elecciones en mayo de 2022es una irresponsabilidad y muestra una falta de empatía”.
En cuanto a la disparada de los commodities en medio de laguerra entre Ucrania y Rusia, el ministro apuntó: “Hubo una subadesmesurada en el precio del trigo. Ahí entendimos que era necesario tener unaactuación más fuerte y contundente porque si no el precio del pan se iba a multiplicaren términos insólitos”.
Para concluir, se pronunció acerca de las medidas destinadasa contener la pérdida de poder adquisitivo, y manifestó: “lLa tarjetaalimentAR es un ejemplo del subsidio directo a las personas. En cuanto a losbonos, si bien no tendrán impacto en la inflación, pero sí tendrá un impacto enla economía de las familias”.
“Los trabajadores formales que son pobres, son una minoría.La mayoría de los trabajadores registrados pueden alcanzar la Canasta Básica”,cerró Kulfas.