El senador fue mojón de la lucha del campo en 2008. Ahora habló de guerra, pero en el gobierno de Cambiemos las avaló.
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Locura es hacer lo mismo una y otra vez, esperando obtener resultados diferentes”, es una antigua cita que se atribuye frecuentemente al genio Albert Einstein, pese a que no existen pruebas contundentes de que sea suya.
Más allá de la rigurosidad histórica, es una mirada interesante sobre el accionar de algunas personas, y en el arco político argentino, suele haber casos que refutan la mencionada sentencia.
Un De Angeli combativo en los cortes de ruta de 2008.
Uno parece ser Alfredo De Angeli, actual senador nacional de Juntos por el Cambio por Entre Ríos, que cambia notablemente de posición en relación con la aplicación de retenciones al sector rural, según el gobierno que tome la medida.
El legislador logró trascendencia a nivel nacional en 2008, cuando el gobierno de Cristina Fernández anunció la Resolución 125/08 de retenciones móviles a la soja, dictada por el entonces Ministro de Economía, Martín Lousteau, hoy integrante de la oposición en el Congreso Nacional.
En aquel momento los productores de distintos puntos del país mostraron su enérgico repudio al proyecto que el Poder Ejecutivo decidió enviar a las cámaras de diputados y senadores, donde Entre Ríos fue uno de los focos álgidos de lucha.
Como referente del sector rural de la provincia surgió la figura del actual senador del PRO, con una imagen mucho más campechana, inmortalizando una frase que quedó en el recuerdo de todos los que atentamente seguían el conflicto.
El ex dirigente de la Federación Agraria de Entre Ríos dijo efusivamente frente a todos los medios nacionales presentes en el bloqueo de rutas que duró 129 días: "Minga vamos a pagar retenciones".
En otro de sus discursos pronunciado durante aquella disputa, De Angeli aseguró frente a una multitud: "Que quede claro, primero, no voy a entrar en ningún partido político; y segundo, jamás voy a traicionar la causa", cerrando su alocución con un recitado: "Yo me voy y los dejo, no sé cuando voy a volver, pero siempre me ha de ver reviviendo tiempos viejos", que motivó el aplauso de todos los presentes.
Finalmente, la medida no se aplicó, con el recordado "voto no positivo" del por entonces presidente de la Cámara de Senadores, Julio Cobos, pero De Angeli ya era una cara reconocida en todo el país.
El ex presidente de la Federación Agraria Argentina de Entre Ríos comenzó a ser tentado, entre 2009 y 2012, por diversos partidos políticos opositores al kirchnerismo, pero se mantuvo firme en su decisión de no sumarse a ninguna fuerza.
El entrerriano aseguró que no iba a sumarse a ninguna fuerza política, pero se incorporó al PRO.
No obstante, en 2013 cambió de parecer y se convirtió en senador nacional por Entre Ríos del PRO, banca que en la actualidad continúa ocupando, y en el medio fue candidato a gobernador de la provincia, en 2015, elecciones que pedió frente a Gustavo Bordet.
Con el paso de referente rural a dirigente político, llegó también un cambio en la mirada del oriundo de María Grande sobre las retenciones.
Eso quedó demostrado en 2018, cuando el gobierno de Mauricio Macri tuvo que recurrir a una posición que apenas una década atrás había repudiado.
“Para cubrir lo que falta, vamos a pedirles a quienes tienen más capacidades para contribuir, aquellos que exportan, que su aporte sea mayor. Sabemos que es un impuesto malo, malísimo, que va en contra de lo que queremos fomentar. Pero les tengo que pedir que entiendan, que es una emergencia y necesitamos de su aporte”, fue el anunció del ex máximo mandatario, y detrás de él se alinearon sus seguidores, entre ellos De Angeli.
Quien 10 años antes lucho con uñas y dientes contra las retenciones, salió públicamente a respaldar la decisión de Macri.
"No nos quedó otro recurso, yo creo que el campo es el último recurso que queda. El presidente nunca quiso hacerlo, pensaba que se podía salir mejor, pero lamentablemente no podemos salir. Es una medida no grata, pero sabemos las condiciones en las que está el país y tenemos que volver a hacer el esfuerzo", admito en ese momento el ruralista, en declaraciones que sorprendieron a muchos.
"No es una medida buena para el sector, pero el país lo necesita", dijo en 2018 sobre las retenciones.
Y agregó: "Hace rato se viene hablando de las retenciones. Yo en dos o tres oportunidades tuve contacto con el presidente y me dijo que no, que las retenciones no. Sin embargo, en este momento, como está el país, para salvar el déficit grave que tenemos en la Argentina, vamos a hacer este esfuerzo".
Finalmente, pese a expresar su malestar por la medida, se mostró muy comprensivo y sostuvo: "Sabemos que es una medida que no es buena para el sector, pero el país lo necesita".
No obstante, como quien vuelve al pago, De Angeli nuevamente retomó su postura en contra de las intervenciones del estado sobre las regalías del sector agropecuario, no haciendo una retrospectiva de lo dicho en aquel 2018, sino que derivada de la decisión otro gobierno, el de Alberto Fernández.
Cinco años después de aceptar el esfuerzo pedido por Macri, el mariagrandense no solo se pronunció en contra de las retenciones, sino que se mostró decidido a batallar, tal como lo hizo en 2008.
"No queremos guerra; queremos soluciones; pero ¿quieren guerra?, guerra van a tener", señaló en declaraciones a Radio Mitre, luego de la determinación del gobierno de aplicar retenciones al aceite y harina de soja.
De Angeli utilizó el mismo término por el cual presidente fue cuestionado, al indicar que comenzaba la "guerra" contra la inflación.
Así las cosas, el entrerriano vuelve a ponerse al frente de resistencia rural contra la intervención del estado, regresando a sus fuentes en favor del sector, siempre y cuando no gobierne Juntos por el Cambio.