
Leonel Matías Santa María es uno de los acusados, junto a Cristian Javier Vital y Andrés Gamarci, por estafas millonarias mediante una mesa de dinero, causa por la cual se realizaron allanamientos en el supermercado La Peruana y oficinas de la ciudad de Paraná.
Santa María, a quien tiempo atrás se lo podía ver ostentando en las redes sociales sus bienes y jactándose de comprar aviones al contado, finalmente se entregó a la justicia luego de dos meses en los cuales su paradero era desconocido.
Luego de su primer encuentro con la justicia, el imputado deberá cumplir, desde este viernes, 120 días de prisión preventiva en la modalidad de arresto domiciliario con monitoreo de control electrónico por dispositivo de tobillera electrónica en su casa, siendo su esposa la garante de la medida morigerada.
Esta determinación la tomó el juez de Garantías de Paraná, Julián Vergara, que subrogó a la jueza Paola Firpo, al hacer lugar al acuerdo presentado por el fiscal, Santiago Alfieri, encargado de solicitar la audiencia, con el consentimiento de los querellantes, Claudio Berón, que representa a cerca de 15 supuestas víctimas; Andrés Bacigalupo y Franco Azziani Cánepa, asesores de un presunto damnificado; y Pedro Fontanetto, defensor de Santa María.
Vergara atendió el acuerdo después de solicitarle al fiscal detalles acerca de las evidencias con las que cuentan Fiscalía y querella para entender como probable la participación de Santa María en el hecho que se investiga.
De esta manera, luego de considerar que el fiscal argumentó su hipótesis con el grado de probabilidad que la etapa requiere, el magistrado hizo lugar al pedido, manifestando, sin embargo, que estaba en desacuerdo con la solicitud del fiscal.
Según consigna APF Digital, el juez consultó al fiscal sobre las circunstancias que motivaron que se dictara, el miércoles 16 la rebeldía de Santa María y su orden de captura, al tiempo que insistió en conocer cuántos días antes de aquella fecha el acusado estuvo sustraído de la jurisdicción Paraná.
En este marco, el fiscal precisó que se fue de la jurisdicción el 2 de octubre, añadió que el 15 intentó contactarlo por mensaje al celular de Santa María que estaba activo, pero no tuvo respuesta. El 16 Firpo dictó la rebeldía y la orden de captura.

Julián Vergara, juez de Garantías de Paraná.
La posición del juez
Vergara sostuvo que expresó su posición personal, sin perjuicio de que señaló que iba a hacer lugar al acuerdo, ya que de no hacerlo, violaría las normas; al expresar: “Si hoy fuera fiscal hubiera pedido una medida más gravosa, por la estructura de este delito, es mi postura”.
Posteriormente, agregó que no solo está vigente el peligro de fuga, como el más evidente, sino también el de entorpecimiento de la investigación.

Primer encuentro de Santa María ante la Justicia.
Por su parte Fontanetto detalló que desde el Servicio Penitenciario le comunicaron que el martes 22 habrá una tobillera disponible, por lo que el juez entendió que mientras no haya disponibilidad del artefacto de control Santa María debía permanecer alojado en Alcaidía de Tribunales hasta que le coloquen el dispositivo, momento en que la prisión preventiva se sustituirá por el arresto domiciliario.
“Si hoy fuera fiscal hubiera pedido una medida más gravosa”, afirmó Vergara.
Vergara añadió que si por cuestiones que este viernes no se pueden prever el dispositivo demora más del tiempo previsto, Santa María cumplirá la medida en la Unidad Penal Nº1 hasta que se disponga de una tobillera.