Se trata del ex titular de la obra social de la provincia. Tras la intervención del organismo que generó su salida en un escándalo por desmanejos y denuncias le salió la jubilación.
M
ediante
el decreto N° 3675, el gobernador de Entre Ríos, Rogelio Frigerio, decidió
semanas atrás intervenir el Instituto de Obra Social de Entre Ríos (IOSPER),
poniendo como titular a Mariano Gallegos, y como la subinterventora, Marina
Alegre,
Esta decisión se fundamentó en numerosas irregularidades que se cometieron durante la presidencia de Fernando Cañete al frente del directorio del organismo, entre las que se encontraban sueldos que llegaban hasta los 16 millones de pesos, repartidos en dos recibos para que no se conozca esa información; además de viáticos, pago de servicios sospechosos, sobreprecios y una deuda de 42.871.884.708 pesos.
En
este marco, y luego de dejar su cargo, al tiempo que lloraba en entrevistas a
distintos medios por su partida de la obra social de la provincia, a la cual
dejó con un pasivo millonario, Cañete obtuvo su jubilación, de acuerdo a lo que
consta en la Resolución 006794 de la Caja de Jubilaciones y Pensiones de Entre
Ríos, del 23 de diciembre último.
Este documento revela que el ex funcionario promovió el beneficio tras haber prestado servicios provinciales comunes durante más de 29 años; y servicios municipales en un período mayor a los 14 años, por lo que el cómputo arrojó aportes durante 44 años y tres días.
Lo que dejó Cañete
De acuerdo a lo que señalaron las nuevas autoridades del IOSPER, el panorama que encontraron al asumir la conducción del organismo fue peor de lo que esperaban.
Según señalaron Gallegos y Alegre en conferencia de prensa: "Las primeras auditorías dan cuenta de 43.000 millones de pesos de deuda, que equivalen a tres ingresos mensuales de deuda”.
Marina Alegre y Mariano Gallegos.
"Además, la obra social tiene un déficit operativo de 3.000 millones de pesos”, afirmaron los interventores, al tiempo que puntualizaron acerca de algunos problemas detectados, entre los que destacaron un gasto para los funcionarios que alcanzaba los 128 millones de pesos mensuales.