
El río Paraná registra este jueves 1.40mts y se encuentra estacionario; sin embargo, esta realidad podría cambiar en proco tiempo.
Según lo que indican los pronósticos, a la brevedad, su caudal sería alcanzado por una importante de crecida que llevaría al curso de agua al orden de los dos metros de altura en el puerto de la capital entrerriana.
Las represas ubicadas aguas arriba de las Cataratas del Iguazú emitieron una alerta dando revelando que, debido a la crecida del río, se ven obligados a abrir compuertas; lo que provocará que el caudal de agua aumente de gran forma.
El intendente del Parque Nacional Iguazú, Atilio Guzmán, informó: “El circuito de la Garganta del Diablo se cerrará al público debido a que actualmente se superan los 9 mil metros cúbicos por segundo, y el agua está muy cerca del nivel de las pasarelas. En forma habitual, dicho caudal no debería superar los 1.600 metros cúbicos por segundo. Este se debe a la crecida del río Iguazú”.
Al respecto, Juan Borús, subgerente de Sistemas de Información y Alerta Hidrológico del Instituto Nacional del Agua (INA), explicó en declaraciones a El Once, que cuál será el panorama a partir de las lluvias en la alta cuenca del Paraná y, por consecuencia, la mayor descarga de caudal por parte de la represa Yacyretá para la producción de energía eléctrica.
“Yacyretá muestra una mejora de corto plazo, pero significativa del caudal que le ingresa y, en consonancia, es lo que está largando. Es que desde el jueves pasado y durante cuatro días, llovió muy fuerte en el sur de Misiones y noroeste de Corrientes; fue un evento significativo que benefició tanto a la alta cuenca del Uruguay como a la del Paraná, es decir, que ambos ríos, que están muy cerca en esa zona y dado que esas lluvias cayeron en una zona de respuesta más rápida, enseguida se notó el aumento de caudal”, indicó.

La bajante del río Paraná llegó a récord histórico, pero comenzaría a repuntar.
Al tiempo que agregó: “En el caso del Paraná, esa onda de crecida está culminando hoy en el momento de máxima descarga y viajará rápidamente por el territorio argentino, lo que producirá una mejora adicional”.
No obstante, el ingeniero recordó: “El escenario complicado no terminó, porque en términos generales continuaríamos con lluvias predominantemente por debajo de lo normal, excepto estos eventos a corto plazo”.
Y aclaró: “No hay que suponer que este evento marca el comienzo del retorno a la normalidad porque en términos regionales, la perspectiva sigue siendo desfavorable”.
En este marco, el especialista advirtió: Esa mejora llegaría a la rivera entrerriana, con un adicional, en unos 50 y 60 centímetros sobre los niveles actuales del río”.
“Con esa recuperación, la expectativa es que el Paraná llegue al orden de los dos metros, permanezca ahí por unos días, pero después bajaría fuertemente porque, además, después de ese evento, dejó de llover bruscamente”, completó.
Borús añadió además: “Esta recuperación tiene un impacto muy favorable en varios sentidos, no solo en la navegación, porque significan dos pies más de posibilidades de calado de los buques, sino también en las tomas de agua urbanas porque se facilita la logística y eso se traduce en los costos dado que cuesta menos proveer a las poblaciones de agua segura con niveles más altos”.
El ingeniero del INA también se refirió a la situación de crecida del Uruguay, y apuntó: “Es significativa, no extraordinaria, en un río que ya alcanzó la normalidad”.
Para concluir, detalló: “A diferencia del Paraná, el Uruguay está fluctuando en términos normales. Y el lunes alcanzará al embalse de Salto Grande con un caudal de casi 17 mil metros cúbicos por segundo, aproximadamente, que es el doble de la capacidad instalada de Salto Grande, con lo cual, continuará laminando la crecida y el tramo inferior gracias a ese trabajo, recibirá una onda de crecida muy controlada”.
Juan Borús, subgerente de Sistemas de Información y Alerta Hidrológico del Instituto Nacional del Agua.
“Esas maniobras del embalse harán que en Concordia, Colón, Concepción del Uruguay y Gualeguaychú se vean aguas altas, pero acotadas y oscilando en los valores que se tienen hoy; cercanos a los 11 metros que es el nivel de alerta en Concordia”, finalizó.