María Juliana Robledo, quien recientemente renunció a la Secretaría de Participación y Gestión Comunitaria de la Municipalidad de Paraná, será parte del equipo de asesores del Ministerio de Ambiente de la Nación.
L
a recientemente renunciada titular de la Secretaría de
Participación y Gestión Comunitaria de la Municipalidad de Paraná, María
Juliana Robledo, ocupará una asesoría en el Ministerio de Ambiente y Desarrollo
Sustentable de la Nación, que dirige Juan Cabandié.
La noticia, que dio a conocer en sus redes la periodista Sandra Miguez, fue confirmada por la propia Robledo a Entre Ríos Ahora.
Tras la presentación de su renuncia a la secretaría de ambiente de Paraná, Juliana Robledo, pasaría a integrar el equipo de trabajo del Ministerio de Ambiente de la Nación.
— ????SanMi???? (@sandramiguez) June 2, 2021
La salida de Robledo se sumó a la de Vanesa Zehnder, tras el conflicto por la obra de ensanche e Bv Racedo
La exfuncionaria de Bahl asumirá en una asesoría en la
Secretaria de Cambio Climático, y también tendrá a su cargo un área que tiene que ver con participación
ciudadana.
Robledo dejó esta semana el gabinete del intendente Adán
Bahl y en su lugar quedó, hasta tanto se
designe su reemplazo, la subsecretaria
general de Presidencia, Eliana Ramos.
Actualmente, hay dos entrerrianos en el gabinete de Ambiente
de la Nación, junto a Cabandié. Soledad Canteros es jefa de la Unidad de
Gabinete de Asesores; y Abelardo Llosa, director nacional de Planificación y
Ordenamiento Ambiental del Territorio. Llosa fue funcionario de Blanca Osuna,
cuando ocupó la Intendencia de Paraná; Robledo proviene también del sector
osunista del peronismo.
No es la primera baja en el área que dejó Robledo en el
Municipio. Antes, en medio del conflicto por el ensanche de un tramo de calle
Racedo, presentó su dimisión la titular de la Subsecretaría de Ambiente y
Acción Climática de la Municipalidad, Vanesa Zehnder.
Ligada con una larga trayectoria de trabajo en la
organización ambiental Eco Urbano, Zehnder se alejó de una gestión comunal aún
con el conflicto de calle Racedo en eferverscencia, y mientras la gestión Bahl
procuraba una salida negociada con los grupos ambientalistas que se opusieron a
la tala de árboles, con la intervención, como mediadora, de la Defensoría del
Pueblo de Paraná. Al final, nada de eso ocurrió.
Lejos del acuerdo, el conflicto derivó después en una
denuncia penal de la Municipalidad de Paraná a los principales protagonistas
del acampe que, por un tiempo, impidió el avance de la contratista. La
judicialización de la protesta mereció de parte de la Defensoría un duro
reproche.
La obra de ampliación de calle Racedo -pensada por la
administración del intendente Adán Bahl como un acceso más dinámico desde la
zona sur de Paraná- se adjudicó a la firma Paulina Castro de Demartín e Hijos
SRL, con un presupuesto de $ 72.982.239,47 y un plazo de ejecución de seis
meses. Los trabajos debieron comenzar el 25 de enero, pero un amparo ambiental
presentado por el Foro Ecologista obligó a aplazar el comienzo.
A mediados de marzo, el pleito que se había generado en la
Justicia quedó resuelto con un pronunciamiento del Superior Tribunal de
Justicia (STJ), que rechazó el amparo ambiental. Pero el lunes 22 de marzo,
cuando la empresa levantó el obrador y se dispuso a comenzar los trabajos, hubo
una manifestación de vecinos y ambientalistas, que derivó en un conflicto de
magnitud por lo que debió intervenir la Policía. De la movida participaron
delegados de la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina
(Uocra), en apoyo al comienzo de la obra.
Luego, siguieron dos instancias de mediación a instancias de
la Defensoría del Pueblo entre la Municipalidad y el grupo que se opone a la
obra -el 28 de marzo, en la Escuela Ernesto Bavio; el 7 de abril, en la Escuela
Normal José María Torres- pero aunque la administración Bahl ponderó esas
instancias de diálogo y se avino a introducir modificaciones en el proyecto
original, no hubo acuerdo.
Fuente: Entre Ríos Ahora