La oposición intentó repudiar en el HCD el Observatorio de la Desinformación que quiere crear la Nación por ser "tendiente a censurar, acallar, perseguir y criminalizar la labor periodística". El piaggismo no acompañó y los fustigan.
E
n la sesión de este viernes, los concejales del oficialismo de Gualeguaychú votaron de forma negativa el proyecto presentado por sus pares de Juntos por el
Cambio (JxC) tendiente a rechazar la iniciativa de un Observatorio de la
Desinformación y de la Violencia Simbólica en Medios y Plataformas Digitales
(Nodio) en la República Argentina.
“Lamentamos que desde el Concejo Deliberante no se haya
podido dar un claro mensaje a favor de la democracia y la libertad de
expresión. Tristemente escuchamos diversos alegatos a favor del control estatal
de la prensa libre y apoyando la persecución y estigmatización de quienes no
opinan como ellos”, señalaron desde el bloque de JxC.
El proyecto elaborado por los ediles Juan Olano, Pablo
Echandi y Alejandra Leissa también establecía “instar al Gobierno Nacional a
desestimar la puesta en marcha del Observatorio (NODIO), ya que es claramente
lesivo de nuestros derechos constitucionales de libertad de opinión y
expresión”.
Cabe recordar que la iniciativa presentada por la Defensoría
del Público del gobierno de Alberto Fernández indica que “trabajará en la
detección y verificación de la información, en la identificación y
desarticulación de estrategias argumentativas, la identificación de las
operaciones de difusión y los sistemas de alertas”.
En ese marco, los ediles de JxC entienden que “dicho
Observatorio vulnera derechos consagrados en nuestra Constitución y de Pactos
internacionales que protegen los DDHH”, en tanto opinaron que “no es aceptable
desarticular las estrategias argumentativas de los periodistas, ni antes ni
después de la publicación de una información u opinión, siendo los jueces los
únicos facultados en última instancia para castigar hechos ilegales vinculados
a la prensa”, remarcaron.
“Ese control nunca puede prevenir del Estado porque se
transforma en una clara censura indirecta y tiende a estigmatizar y
criminalizar la libre expresión. El observatorio NODIO es un intento de
silenciar las voces críticas y supervisar a los medios de comunicación,
resultando la idea más autoritaria que se recuerde desde la recuperación de la
democracia”, aseguraron.
Asimismo, resulta importante destacar que entidades como la
Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) y la Asociación de Entidades
Periodísticas Argentinas (ADEPA) condenaron enfáticamente este observatorio por
considerar que “monitorear el pensamiento no favorece la libertad de
expresión”, al tiempo que entendieron que se abre “una peligrosa puerta para la
consumación de conductas aún más graves como persecuciones de la libre
expresión”.
Según los concejales Olano, Echandi y Leissa “nadie -y menos
el Estado- puede arrogarse el derecho de distinguir la mirada subjetiva del
periodista y menos calificarla como una operación de difusión a los efectos de
ser silenciada. Además, el periodismo es un reaseguro de defensa de los
ciudadanos, la principal herramienta en contra de los gobiernos despóticos y
totalitarios y una de las actividades sagradas dentro de una democracia”.
Por último, resumieron que “el NODIO termina siendo un paso
firme y peligroso hacia el control de los contenidos periodísticos, entrañando
severas amenazas a la libertad, la expresión y la democracia, por lo que debe
ser rechazado no como una defensa sólo al periodismo, sino a la sociedad
argentina en su conjunto”, finalizaron.