El gobernador asistió al mensaje del presidente en el Congreso y salió "preocupado" porque considera que el jefe de Estado apostó a "la división" con tantos cruces al kirchnerismo. Además pidió "revertir" la situación económica.
E
l presidente Mauricio Macri encabezó la apertura de las sesiones ordinarias del Congreso con un discurso de tono electoral y fuerte polarización con el peronismo. Desde el inicio del discurso, que duró casi una hora, el Presidente mostró que la idea era confrontar, especialmente, con el kirchnerismo. Lo hizo al hablar del "herencia recibida" y sostener que el suyo es un gobierno que decidió "dejar de patear los problemas" y de tomar "atajos".
"La Argentina está mejor parada que en 2015”, aseguró, pero aclaró: “mejor no significa que ya estamos donde queremos estar, si no que salimos del pantano donde estábamos".
Otro párrafo fuerte y con clara intención de profundizar la grieta electoral del kirchnerismo fue la referencia a la corrupción. Macri mencionó como logros de su gestión la Ley del Arrepentido ("clave para el avance de muchas causas") y el DNU de extinción de dominio. "Que los que se opongan digan dónde están parados y a quién quieren proteger. Se acabó el tiempo en que los delincuentes se salen con la suya", desafió.
Para el cierre, Macri volvió a motivar a su tropa en oposición al kirchnerismo. "Hoy les digo a los argentinos: a no aflojar, a no tirar la toalla. No dejemos que los predicadores de la resignación y el miedo le ganen a la esperanza. Porque nuestra esperanza es fuerte", rugió.
Al salir de la Asamblea Legislativa, el gobernador entrerriano Gustavo Bordet se mostró crítico del mensaje presidencial,
al que calificó de "confrontativo" y que apuntó a "generar división".
También cuestionó la situación económica. “La fuerte recesión de la economía en su conjunto, la caída en los niveles de empleo, la alta inflación con la consecuente reducción del consumo, y el incremento permanente de las tarifas de los servicios públicos constituyen un escenario que el gobierno nacional debe revertir”, advirtió el mandatario provincial.
Bordet aprovechó para colar su mensaje de campaña: el de contraste entre los modelos de gestión en la provincia y en la Nación. “Hemos demostrado en nuestra provincia que se puede tener equilibrio fiscal y ampliar derechos sociales, construir viviendas, cuidar la salud y la educación, y pagar los sueldos al día sin recortar presupuestos en áreas claves ni despedir a nadie”, se comparó el mandatario.
“Entendemos que el Estado es el que debe garantizar la justicialista social porque los mercados nunca lo harán”, puntualizó el entrerriano.
“No nos resignamos al país del ajuste y de la crisis, y hemos solicitado, desde el rol responsable de oposición que ejercemos, medidas que permitan a nuestras Pymes acceder a créditos con tasas de interés razonables, y reactivar la economía para generar más empleo”, aseveró Bordet, que durante el discurso de Macri estuvo rodeado por sus colegas de Cambiemos: la bonaerense María Eugenia Vidal, el porteño Horacio Rodríguez Larreta y el jujeño Gerardo Morales.