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enadores de Cambiemos anunciaron este martes en la reunión de la Comisión de Acuerdos que aún debían discutir internamente el pliego de Martín Carbonell como integrante del Superior Tribunal de Justicia (STJ).  En la bancada opositora hay resistencias a acompañar con su voto la propuesta del gobernador Gustavo Bordet, debido a que Carbonell es penalista y ocuparía un lugar en la Sala Civil del STJ.

Por este motivo puntual de su currículum, un grupo de abogados presentó ante la Cámara Alta una impugnación, alegando la "falta de idonedidad" para el cargo en la que recaería el abogado concordiense. La presentación, que no parecía que tendría mucho peso en el tratamiento legislativo del pedido de acuerdo, encontró cierto respaldo en la bancada opositora.

Hasta el momento del encuentro de la comisión de Asuntos Constitucionales y Acuerdos todo hacía suponer que la postulación que hizo Bordet para reemplazar a Leonor Pañeda en la vocalía del STJ tendría el acompañamiento de todas las bancadas, como ha venido ocurriendo.

Sin embargo, a poco de sentarse en la mesa a tratar el tema, el presidente de la Comisión, Lucas Larrarte (PJ – San Salvador) fue informado por uno de los principales referentes de la bancada de Cambiemos que el tema aún tenía que ser debatido al interior del bloque opositor, que no había asumido aún una posición unánime. Otros integrantes de peso de Cambiemos en el Senado asintieron con gestos claros la postura.

Según registró APF, varios senadores de la oposición cuestionan que el gobernador haya elegido para cubrir un lugar en la Sala Civil a un penalista. La situación sorprendió a legisladores oficialistas que habían recibido, desde otro sector del bloque opositor que integran la UCR y el PRO, señales claras de que iban a acompañar con su voto la iniciativa.

Debido a la dilación opositora, la Comisión volverá a reunirse el próximo martes 11 para volver a tratar el pliego de Carbonell. Sería el plazo máximo que la bancada justicialista daría a Cambiemos para que tome una postura. Si los opositores llegan sin una decisión definitiva o, en el peor escenario, con una decisión en contrario, el oficialismo aprobaría por simple mayoría el dictamen, situación que se repetiría seguramente cuando se vote en el pleno el acuerdo.

Mientras tanto, Carbonell ejerce -interinamente hasta que el Senado deje firme su nombramiento- una vocalía e incluso la presidencia de la Sala Civil del STJ.