
La petrolera estatal tiene planes de transferir la gestión de su unidad de negocio YPF Agro, convirtiéndola en una nueva empresa del sector a través de una licitación que se llevará a cabo este año, una vez que reciba la aprobación del directorio. Este modelo se establecerá como una sociedad mixta, donde YPF conservará el 50% del capital y la marca, mientras que el manejo operativo estará bajo la responsabilidad del nuevo socio, quien deberá adquirir exclusivamente el gasoil de la petrolera.
Horacio Marín, presidente y CEO de YPF, hizo este anuncio en la Exposición Rural de Palermo, donde explicó que el nuevo operador será el encargado del management, en tanto que el CFO será designado por YPF. La empresa contará con un estatuto que protegerá su estructura ante eventuales cambios políticos.
“Nos falta la aprobación del directorio, pero después de mucho tiempo, vamos a llamar a licitación para YPF Agro. YPF no tiene el know how del agro. ¿Ustedes me ven como un experto en soja? No. Vamos a licitar para que alguien del sector agropecuario gestione esa compañía, no YPF. La idea es crear una empresa mixta, conservando la marca, entre YPF y un nuevo socio [aún por definir], que se encargará de la operación”, afirmó.
Marín detalló que el negocio será un 50% y 50%, y la gestión recaerá en la empresa ganadora de la licitación; YPF proporcionará al CFO para mantener el control financiero. El objetivo de la petrolera es que este proyecto se concrete este año, destacando que existe un gran interés por parte de las empresas. Este emprendimiento está diseñado, pero aún requiere la aprobación del directorio.
El presidente y CEO de YPF, Horacio Marín, se refería a la situación del sector petrolero y las actividades agroindustriales de la firma.
“Únicamente podrán adquirir gasoil de YPF. Nos compran a nosotros y nos pagan; no quiero que me paguen con chupetines, ketchup, soja ni nada de eso, porque no tengo idea de cómo venderlo y siempre pierdo dinero. Por eso, prefiero cederlo a alguien que sepa manejarlo y hacerlo mucho más eficiente que nosotros, y dado que hemos desarrollado todo el efecto comercial durante 20 años, también merecemos obtener ganancias. Alguien va a licitar, va a ganar, repartirá las ganancias y seguramente nosotros mantendremos el CFO, porque es beneficioso estar dentro de todo…”, agregó.
Aclaró que esta estrategia busca permitir que quienes tienen experiencia en los respectivos negocios puedan operar con éxito. Según puntualizó, YPF se enfoca en producir pozos, petróleo, refinarlo, vender combustibles y en el futuro, comenzar a generar ganancias a partir de productos agropecuarios.
El ejecutivo enfatizó que YPF quiere optimizar su negocio, tal como lo hacen las empresas privadas, trabajando con la oferta y la demanda. Como mencionó en otra ocasión, la petrolera sufría pérdidas a las 3 a.m., horario en el cual estadísticamente nadie repostaba. Para fomentar el crecimiento se implementó una iniciativa que consiste en un descuento del 5% en el precio de la nafta al cargar combustible durante la madrugada, entre las 00:00 y las 06:00 horas. Actualmente, comentó, la carga de combustible nocturna ha aumentado un 30%.
Consultado sobre la situación de los biocombustibles, opinó: “Los biocombustibles ya son un negocio muy grande, y cuando es así, todos debemos convivir. No legislo, gestiono. Si la Secretaría de Energía decide proponer una nueva ley… No me gusta lo individual, creo que debemos sentarnos en una mesa todos los involucrados: petroleras, empresas de biocombustibles y automotrices, y hay que prestar más atención a las automotrices que a las petroleras, porque a las de biocombustibles o a las petroleras les gustaría acaparar el negocio al 100%, y es comprensible”. Según él, esta colaboración garantizará un equilibrio adecuado.
Mencionó que el biodiésel presenta más desafíos que el bioetanol y en la Patagonia no podría utilizarse porque se presenta en bajas temperaturas. No obstante, señaló que son áreas en las que aún deben trabajar. Además, indicó que los precios son relativos y dependen del momento económico del país. “Es una industria ya establecida y bastante significativa; es un negocio de 2500 millones de dólares, y mi objetivo es terminar con YPF y dejar un legado para mis nietos. No estoy en contra de los biocombustibles. Si se promulga una ley bajo la dirección de la Secretaría de Energía y del Estado, es fundamental que todos estén en la mesa y que no haya cabildeo individual, porque de lo contrario, será una lucha de poder que no llevará a ninguna legislación”.
También destacó que han trabajado intensamente en eficacia, productividad y avances tecnológicos, y en tres o cuatro años, la empresa será reconocida como la mejor en recursos humanos, la más tecnológica, y se observarán cambios significativos en la percepción de los jóvenes.