
Con la llegada del receso escolar de invierno, las calles de Buenos Aires se llenan de actividad. Familias con bolsas, mochilas o simplemente con ganas de disfrutar un buen rato salen en busca de planes que entretengan a los más pequeños y ofrezcan un respiro del ritmo cotidiano. En ese paisaje urbano, las carteleras se inundan de películas infantiles, los teatros multiplican sus funciones, los parques de diversiones despliegan sus vibrantes colores y los centros culturales ajustan sus agendas especiales.
Sin embargo, el entusiasmo por salir se enfrenta a una realidad palpable: la presión económica. Entre promociones, descuentos, combos y la búsqueda de propuestas gratuitas, planificar las salidas de invierno se ha convertido en una necesidad para muchas familias.
Para comprender el panorama de opciones y precios, la consultora Focus Market llevó a cabo un relevamiento con la intención de ofrecer un análisis detallado y actualizado. El informe abarcó tanto salidas pagas clásicas como alternativas sin costo, con el propósito de ayudar a diseñar planes equilibrados para todos los presupuestos.
Damián Di Pace, director de la consultora, comentó que las familias no solo eligen qué hacer, sino cómo financiarlo. Según explicó, muchas veces la decisión sobre la salida se basa en la promoción más atractiva del día. De esta manera, los descuentos y ofertas especiales se han convertido en el motor de las decisiones, impulsados por el auge de las billeteras virtuales, los 2×1 en entradas y las bonificaciones en combos que pueden adquirirse a través de aplicaciones o programas de fidelización.
En este contexto, el informe destacó que la salida más típica para las familias de clase media sigue siendo el combo de cine y cena rápida, aunque los costos han requerido una cuidadosa planificación. Para una familia tipo (dos adultos y dos niños), el gasto mínimo sin descuentos se aproxima a los $127.700. Este cálculo incluye cuatro entradas al cine por $56.800 (a $14.200 cada una), un combo familiar en el cine por $37.900 (dos baldes de pochoclo, cuatro gaseosas medianas y dos golosinas) y una cena en un local de comida rápida, que cuesta al menos $33.000, con dos combos medianos de $7.700 cada uno y dos cajas infantiles de $8.800 cada una.
El estudio enfatizó que muchas familias han ajustado sus agendas para aprovechar promociones de 2×1 o descuentos del 40% mediante billeteras virtuales. Estos beneficios han sido decisivos a la hora de elegir el día y el horario de la salida.
Aparte del cine, Focus Market analizó otras salidas comunes. Los parques de diversiones, por ejemplo, mantienen una gran demanda. De lunes a viernes, el Pase Full, que incluye casi todos los juegos, tiene un costo de $21.000 por persona, mientras que el Pase Rápido asciende a $47.400. En el caso de sábados, domingos y feriados, el Pasaporte Full se eleva a $26.100, con el Pase Rápido alcanzando los $52.400 por persona.
Otra opción popular es el Bioparque, que se ha consolidado como un plan de día completo al aire libre. Para los residentes argentinos mayores, la entrada cuesta $35.700, mientras que los niños de 3 a 10 años deben abonar $30.345. Un dato que alivia un poco el presupuesto familiar es la eliminación del cobro por estacionamiento, que en 2024 representaba un gasto adicional.
El teatro, por su parte, se presenta como otra opción con una amplia variedad de precios. El relevamiento marcó un rango que va desde $13.000 hasta $120.000 por entrada, dependiendo de la obra, la sala y la ubicación seleccionada. También se consideraron los cargos por servicio que se aplican en las ventas online, con costos variables según la plataforma o el teatro.
Para quienes buscan alternativas más accesibles, el Planetario ofrece entradas desde $1.200, y también proporciona ingreso gratuito para menores de 6 años, jubilados y personas con discapacidad. Los espectáculos con entrada paga comenzaron a venderse a partir del 7 de julio, con el fin de sumar opciones para distintos públicos.
El informe subrayó la importancia de las estrategias para planificar el entretenimiento familiar. En tiempos de ajuste económico, muchas familias priorizan salidas con beneficios bancarios, descuentos de billeteras virtuales y programas de fidelización. Las promociones de entradas 2×1 y los combos con descuentos significativos han sido elementos clave para organizar las vacaciones.
Focus Market destacó que la recreación y la cultura han experimentado un aumento promedio del 270% en precios, según datos del Indec. Además, se observó que los meses de junio y julio exhibieron un aumento estacional, con mayor presión sobre los precios debido a la elevada demanda. En el acumulado anual, el incremento fue del 64 por ciento.
Frente a este contexto, las familias intentan equilibrar sus gastos. Una estrategia común consiste en alternar días con salidas pagas y jornadas con actividades gratuitas o de bajo costo. Museos, bibliotecas y centros culturales han intensificado su programación infantil con acceso libre, especialmente durante las dos semanas de receso escolar en CABA y en las principales ciudades del país.
El relevamiento incluyó ejemplos de estrategias aplicadas por las familias: aprovechar funciones de cine en días de semana con precios promocionales, elegir horarios menos concurridos, comprar entradas de teatro con anticipación para obtener tarifas más bajas y organizar salidas al Planetario o a espacios públicos con costos reducidos o ingreso gratuito.
También se observó que los combos familiares en locales de comida rápida se han convertido en una opción habitual, aunque el costo sin descuentos supera los $30.000. Las promociones con bancos o billeteras virtuales han jugado un papel fundamental para disminuir esos montos.
En el caso de los parques de diversiones, la diferencia de precio entre semana y fines de semana llevó a muchas familias a planificar visitas en días laborables para reducir costos. El adicional de los pases rápidos duplicó el gasto por persona, por lo que la elección del tipo de pase se volvió esencial en la planificación.
El Bioparque apareció como una opción de día completo, con precios diferenciados para adultos y niños, y la ventaja del estacionamiento gratuito. Esta alternativa ha ganado popularidad ante quienes buscan un plan al aire libre con menor presión en gastos adicionales.
Por último, el estudio destacó las opciones gratuitas disponibles en CABA y otras ciudades: museos con agendas especiales, bibliotecas con talleres y lecturas, centros culturales con espectáculos infantiles, y espacios públicos que han reforzado su oferta para el receso escolar. Estas actividades fueron fundamentales para equilibrar el presupuesto familiar sin sacrificar la calidad de la experiencia.