
La ministra de Seguridad Patricia Bullrich encabezó este sábado una reunión en la localidad bonaerense de inundaciones-por-el-rio-salado-tras-los-cruces-funcionarios-de-nacion-y-kicillof-se-reunieron-en-9-de-julio.phtml">9 de Julio junto a intendentes, productores y funcionarios nacionales para coordinar acciones frente a las graves inundaciones que afectan al interior de la provincia de Buenos Aires. Además, anunció una asistencia de $1900 millones para los municipios más perjudicados y la llegada de maquinaria del Ejército y Vialidad Nacional para reparar caminos rurales y accesos.
“Es muy importante este contacto directo, que nosotros podamos venir aquí y escuchar a productores de distintos lugares. Poder conocer los problemas que están viviendo, las necesidades de poder llegar a su casa o de poder entrar a su campo o al pueblo”, expresó Bullrich ante los medios locales. “Hemos hablado de temas de corto plazo, como arreglar los caminos; y de problemas de mediano y largo plazo que ya están en marcha, como la gran obra del Salado, que es lo que podría canalizar realmente el agua”, añadió.
Acompañada por el secretario de Agricultura, Sergio Iraeta, y el titular de la Agencia Federal de Emergencias, Santiago Hardie, la funcionaria confirmó que el Ejército Argentino, Vialidad Nacional y la Agencia Nacional de Emergencias trabajarán de forma coordinada en las zonas más críticas. “Van a venir con maquinaria, motoexcavadoras, retroexcavadoras y las que hagan falta. También habrá una ayuda directa de 1900 millones de pesos que irán a los municipios de acuerdo al nivel de anegación. Con eso podrán comprar gasoil, piedra, caños y materiales necesarios para esta emergencia”, detalló.
Al encuentro asistieron los intendentes María José Gentile (9 de Julio), Salvador Serenal (Lincoln), Franco Flexas (General Viamonte), Sergio Barenghi (Bragado) y Daniel Stadnik (Carlos Casares), junto a funcionarios provinciales de la Autoridad del Agua y del Ministerio de Asuntos Agrarios. Se resolvió además ampliar el Comité de Emergencias y reforzar la coordinación entre Nación, Provincia y municipios para evitar que haya “personas, caminos o pueblos aislados”.
En relación con las obras estructurales, Bullrich afirmó que el Gobierno nacional “se compromete a terminar en un año la etapa 4 del Plan Maestro de la Cuenca del Salado”, una intervención clave para prevenir futuras inundaciones.

Las repercusiones de los productores sobre los anuncios de Bullrich
La visita de la ministra fue bien recibida por los dirigentes de las entidades rurales, aunque señalaron que las medidas “no resolverán la crisis de inmediato”. El presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Nicolás Pino, consideró ante TN: “Fueron anuncios lógicos dentro de lo posible. Soluciones mágicas no hay, pero es bueno que la Nación haya tomado parte y active un sistema con el Ejército y Vialidad para atender lo urgente”.
Pino resaltó la necesidad de retomar la obra del río Salado y valoró el fondo anunciado: “No es menor un fondo de $1.900 millones para distribuir según la situación de emergencia de cada localidad. Es muy importante haber escuchado a los ciudadanos y no solo a los productores agropecuarios”.
Desde la Federación Agraria Argentina (FAA), su presidenta Andrea Sarnari afirmó: “Contentos no se puede estar en una situación crítica como esta. Estamos amargados porque no solo afecta a la producción, sino a la vida cotidiana: los alumnos no pueden asistir a las escuelas, y muchas familias están aisladas”.
Por su parte, el titular de Coninagro, Lucas Magnano, insistió en que “la terminación de la Cuenca del Salado es indispensable” y valoró que “se haya comenzado un trabajo articulado entre Nación y Provincia, más allá de las diferencias partidarias”.
Según informaron fuentes oficiales, la asistencia se complementará con créditos blandos del Banco Nación y la firma de convenios entre la Secretaría de Agricultura y los municipios para financiar la compra de materiales y combustible destinados a reparar los caminos rurales.

Los reclamos del campo y las críticas por las obras paralizadas
Durante la asamblea en la Sociedad Rural de 9 de Julio, más de 400 productores tomaron la palabra para describir una realidad recurrente: caminos intransitables, falta de obras hídricas, presión impositiva y municipios que no atienden sus reclamos. Bullrich reconoció las quejas y propuso avanzar en la creación de consorcios de productores para el mantenimiento vial, en sustitución de las tasas viales que muchos distritos destinan a “gastos corrientes”.
Productores como Jorge Flores Belaunde, de Quiroga (9 de Julio), advirtieron que “el 30% del establecimiento está bajo el agua” y que “los caminos están destruidos”. Otro productor, Oleh Jachno, de Carlos Casares, describió: “Tenemos un 90% del campo inundado y no podemos acceder ni contar con asistencia médica si surge un problema”.
En Bragado, la productora Paulina Bordeu denunció que “el municipio no hizo obras cuando hubo sequía, que era el momento ideal”, y que ahora “los animales se están muriendo y los caminos son un río”. También cuestionó el cobro de la tasa vial, que para un campo de 500 hectáreas llega a “entre 5 y 7 millones de pesos por mes”.
La crisis, además, dejó en evidencia diferencias entre la Provincia y la Nación. El ministro bonaerense de Infraestructura, Gabriel Katopodis, acusó al Gobierno nacional de paralizar la etapa 2 del tramo 4 del Plan Maestro del Río Salado, una obra considerada “política de Estado” desde 1997. “De haberse mantenido el ritmo de ejecución, la obra podría haberse finalizado en 2024”, advirtió el funcionario, quien sostuvo que “la inversión en infraestructura es fundamental para el crecimiento y la calidad de vida”.
RV/DCQ




