A casi dos semanas del anuncio de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, sobre el envío de $1900 millones y el despliegue del Ejército para asistir a los partidos de la provincia de Buenos Aires afectados por las inundaciones, el balance en el sector es heterogéneo. Mientras algunos productores confirmaron la llegada de recursos y asistencia en el terreno, aunque insuficientes ante la magnitud del daño, otros sostienen que el apoyo aún no se ha materializado.
La promesa incluía la asignación de fondos para municipios en emergencia hídrica y el envío de equipos viales destinados a recomponer caminos rurales, indispensables para el acceso productivo, sanitario y escolar en la zona.
En detalle, en la intendencia de 9 de Julio, gobernada por María José Gentile (PRO–Somos), confirmaron que la ayuda nacional ya comenzó a llegar: se enviaron maquinarias y operarios del Ejército, lo que permitió avanzar en accesos prioritarios como La Niña.
En cambio, en la intendencia de Carlos Casares, a cargo de Daniel Ángel Stadnik (Frente de Todos), informaron que están presentando la documentación para tramitar un subsidio por 85.000 litros de combustible y que ultiman detalles con Santiago Hardie, director de la Agencia Federal de Emergencias (AFE), para que en los próximos días se envíe una motoniveladora.
En el distrito bonaerense de Carlos Casares, una de las zonas más afectadas desde comienzos de año, la presidenta de la Sociedad Rural local, Érica Moro, valoró el vínculo inicial con Nación. “La atención fue excelente, muy positiva, nos vimos muy esperanzados, muy agradecidos de que Bullrich accediera a reunirse con nosotros”, describió a LA NACION respecto del encuentro del sábado 8 en 9 de Julio.
Según detalló, la ministra primero mantuvo una reunión con intendentes y luego un encuentro con productores, además de un breve espacio con referentes rurales de cada localidad.
Dos semanas atrás, la ministra Patricia Bullrich recibió a los presidentes de las Sociedades Rurales de Carlos Casares y 9 de Julio, entre otras
A esa instancia le siguió, al lunes siguiente, una reunión técnica con funcionarios nacionales y provinciales encabezada por Hardie. Allí, Moro contó que se presentó “una lista de no más de 13 máquinas para dividir entre los municipios afectados”. La respuesta generó inquietud.
Los representantes locales solicitaron equipos concretos, pero, según la dirigente, Hardie explicó que la distribución no se realizaría de esa manera: serían los propios funcionarios quienes recorrerían los tramos afectados y, a partir de su observación, decidirían qué maquinaria destinar. Para Moro, ese método resulta lento y poco operativo ante el estado de los caminos.
El problema no terminó allí. Según Moro, las máquinas llegarían sin personal ni logística: “Vendrían sin logística; es decir sin los operarios, sin los maquinistas, ni viáticos, sin reparaciones ni repuestos, sin nada, la máquina pelada”. Ante ese esquema, varios intendentes advirtieron que no podrían afrontar esos costos adicionales.
Como consecuencia, el envío quedó en pausa. Incluso si la asistencia avanza, Moro consideró que se trataría apenas de “dos o tres máquinas para cada municipio, que es la nada misma” frente al panorama hídrico.
Respecto del fondo económico anunciado, la dirigenta reveló que la distribución será mucho más extensa de lo previsto: “Va a estar dividido en más de 20 localidades que hoy tienen emergencia”. En ese esquema, Carlos Casares recibiría el equivalente a 85.000 litros de gasoil.
Moro subrayó que el distrito afronta una emergencia prolongada: “Nosotros venimos de febrero o marzo, remándola. La verdad es que no tenemos más dinero, en serio”. Por eso exigen una partida adicional que contemple la trayectoria del daño.
La dirigente resaltó la urgencia de recuperar la infraestructura vial para restablecer la producción en zonas que podrían recuperarse en verano: “La importancia de los caminos, infraestructura para poder llegar, eso principalmente”.
Hugo Enríquez, presidente de la Sociedad Rural local, aseguró que “hace rato, mas de tres meses, que ya hay maquinarias del gobierno provincial” trabajando en accesos y caminos claves
Marcelo Manera – LA NACION
El distrito tiene 250.000 hectáreas, de las cuales unas 120.000 están bajo agua. “Hay caminos que son canales, todo de agua, que tampoco hoy lo puede arreglar la Municipalidad”, describió.
La situación contrasta parcialmente con la realidad del partido de 9 de Julio, donde parte de la asistencia ya está operativa, en este caso con la provincia. Hugo Enríquez, presidente de la Sociedad Rural local, aseguró que “hace rato, más de tres meses, que ya hay maquinarias del gobierno provincial” trabajando en accesos y caminos claves.
Sobre el arribo de equipos nacionales, señaló que “llegaron el resto de las máquinas: tres retroexcavadoras, una champion, dos palas del Ejército, con operarios del Ejército”. Sin embargo, otras llegaron sin personal.
Pese a valorar el cumplimiento de las promesas iniciales, advirtió límites estructurales: “Son pocas, siempre van a ser pocas; necesitamos más máquinas, pero no hay”.
Dijo que, por eso, las reparaciones se enfocan en accesos urbanos antes que en caminos productivos. “Lo más complicado es que no hay maquinaria para poder empezar a trabajar de forma más directa y con más rapidez sobre los caminos de producción”, explicó Enríquez.
La emergencia hídrica todavía impide trabajos duraderos. “Las reparaciones no son para decir esto va a perdurar en el tiempo”, sostuvo, ya que el agua continúa retenida y las lluvias siguen condicionando la estabilidad del terreno.
Pese a los desencuentros, Enríquez valoró la coordinación institucional: “Estamos todos juntos sentados en una mesa, las gremiales, referentes de productores y los tres estados. Y los pedidos se van cumpliendo, por ahí no con los tiempos que uno plantea, pero se van cumpliendo”.
En este escenario, será el verano el que marque un punto de inflexión. En ese sentido, en el sector coincidieron en que una eventual mejora climática podría permitir la recuperación productiva en parte del área anegada, pero solo si la infraestructura vial se restituye a tiempo.




