Desde el miércoles están de paro los alrededor de 350 trabajadores que construyen la nueva planta potabilizadora de agua de Paraná, en Rondeau y Echeverría, reclamando que una subcontratista que opera en la obra tome operarios locales. Los trabajos en la planta los lleva adelante la Unión Transitoria de Empresas (UTE) Degremont-Esuco pero el problema surgió a partir del ingreso de una subcontratista, la empresa rosarina MAK, que construye el laboratorio y algunas oficinas. De acuerdo con lo que denunció la Uocra (Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina), la subcontratista tomó operarios extranjeros y de la provincia de Santa Fe, sin agotar la búsqueda de personal en Paraná y zonas aledañas. Se explicó asimismo que la indicación de privilegiar al trabajador local está en el contrato que firmaron las empresas con el Estado para llevar adelante la obra y, por otro lado, la firma había acordado con el sindicato que así se haría. Pues bien, autoridades de la Uocra y delegados de los trabajadores se reunieron ayer con el director de Trabajo, Oscar Balla, para plantearle la situación y éste se comunicó después con la empresa con el ánimo de realizar una audiencia de conciliación lo más pronto posible. Según confirmó Balla ayer a la tarde, este encuentro se concretará el lunes, a las 11, en la sede de la Dirección de Trabajo, y todas las partes se comprometieron a asistir. Mientras, el representante en Paraná del Ente Nacional de Obras Hídricas y de Saneamiento (que financia y ejecuta la obra), ingeniero Oscar Schuster, sostuvo que la UTE “ha dado cumplimiento” al punto en cuestión y que un “90 % del personal es de Paraná y del área de influencia”. Explicó además que “la gente de afuera” cumple tareas que requieren especialización. PROBLEMA. En diálogo con EL DIARIO, el colaborador gremial de la seccional Paraná de la Uocra, Miguel Taborda, explicó que “el problema es que hayan traído trabajadores de otro lugar sin evaluar primero si existía mano de obra local”, comenzó diciendo el dirigente. “Acá en Paraná hay mano de obra desocupada y tranquilamente pueden cumplir actividades en la planta porque el trabajo que están haciendo (los extranjeros) no es específico: están construyendo los edificios donde estarán el laboratorio y algunas oficinas, no es trabajo de una especialidad determinada. En este sentido, no se hacen las obras según lo dice el gobierno, es decir para fomentar el trabajo local”, agregó. Precisó que el reclamo apunta a “una subcontratista, MAK, que vino hace un mes y ha tomado gente de Paraguay y de Santa Fe. Nosotros venimos siguiendo todas las obras en conjunto con la Dirección, no es que se da esta medida por casualidad, venimos haciendo este trabajo desde hace tiempo, en seguridad y todo lo que refiere al tema laboral”. Por último, informó que “desde el miércoles estamos parados esperando una respuesta. Ese día nos presentamos a la Dirección de Trabajo para comunicar el estado de asamblea y el jueves estuvimos hablando en una posición intransigente con la empresa”, dijo.EN TRABAJO. Hasta las 14.30 de ayer, el director de Trabajo, Oscar Balla, estuvo tratando de acordar una reunión entre la empresa y los trabajadores. La idea era que el socio de MAK que estaba ayer en Paraná se acercara a la repartición pública a dialogar con el sindicato. “Los llamé dos veces a Rosario y me aseguraron que se iban a poner en contacto conmigo”, comentó Balla. “Los trabajadores dijeron que habían acordado algo sobre la incorporación de personal con la empresa y ella no ha cumplido. Han traído mano de obra extranjera, ni de la zona, ni de la localidad, mientras que con el gremio habían acordado que iban a tomar operarios locales”. Según la Uocra, serían 25 paraguayos y 14 rosarinos y el conflicto se agudizó recientemente por el hecho de que, al retirarse de MAK dos operarios, la empresa haya tomado “dos paraguayos más, en vez de emplear gente de la zona”.La obraLA NUEVA PLANTA POTABILIZADORA DE AGUA se construye en Rondeau y Echeverría y se prevé que se inaugure a mediados de este año. Fue gestionada por la actual gestión municipal y está siendo financiada en su totalidad por la Nación, a través del Ente Nacional de Obras Hídricas y de Saneamiento (Enohsa), que administra los fondos y controla los trabajos. La obra se está ejecutando en dos frentes: Degremont-Esuco ejecuta la planta potabilizadora, e Hidroconst-Isolux construye los centros de distribución e instala las cañerías maestras. Recientemente la Comuna debió intimar a esta última UTE a reparar las calles que había roto para colocar las cañerías. La obra tiene un presupuesto de alrededor de 85 millones de pesos, íntegramente aportados por la Nación en concepto de subsidio, se informó. Para el Enhosa está todo bienEl responsable de la obra por el Ente Nacional de Obras Hídricas y Saneamiento (Enhosa), ingeniero Oscar Schuster, dijo que la UTE que construye la nueva planta potabilizadora ha cumplido con tomar mano de obra local, y que “la gente de afuera” está para realizar tareas especiales. En diálogo con EL DIARIO, explicó que “hay un reclamo sindical por el cual interrumpieron las tareas: nosotros, como inspectores de obra, lo que controlamos es que se le esté abonando a todo el personal y que todos los trabajadores que se tomen estén habilitados para trabajar. A esto lo hemos verificado”, sostuvo. Admitió que “el pliego lo que establece es que preferentemente sean personas de Paraná” las que trabajen en la planta y aclaró que “la UTE (Degremont-Esuco) ha cumplido y el 90 % es gente de Paraná y área de influencia. No obstante, hay gente de afuera y de otras localidades, dada la complejidad de la obra, la tecnología y el equipamiento de gran porte, que hace necesario contar con especialistas y gente calificada para el montaje”. Schuster ratificó, asimismo, que “desde el miércoles hay conflicto y toda la planta está parada”. “Dicen que la gente de Paraná no sabe trabajar”En declaraciones a LT14, Sebastián Díaz y Fabián Monzón –delegados de Uocra– contaron que “trajeron a esos muchachos de afuera echando de menos la gente de acá”. Según indicaron, la empresa contratista aduciría que el personal de Paraná “no sabe trabajar”. Los delegados manifestaron desconocer si los trabajadores paraguayos “están en negro o en regla” y destacaron que hay afiliados al sindicato “capacitados para trabajar”.“La empresa que subcontrató esto dice que la gente de acá no sirve”, insistieron tras destacar que pretenden que “esa gente se retire”. Asimismo sostuvieron que “trayendo gente boliviana o paraguaya cobran de menos y le sacan trabajo a la gente de acá”. (Fuente: El Diario)
