Las elecciones legislativas nacionales de 2025, programadas para el próximo domingo 26 de octubre, representan un hito en la historia electoral argentina: por primera vez se implementará la Boleta Única de Papel (BUP) en todo el país. Este sistema tiene como objetivo simplificar el proceso electoral, garantizar la presencia de todas las listas y disminuir la posibilidad de faltantes o manipulación de boletas.
La Cámara Nacional Electoral (CNE) anunció que el 1° de septiembre se llevará a cabo una audiencia pública para presentar el diseño definitivo de la Boleta Única, que incluirá símbolos partidarios, fotografías y las denominaciones de las listas aprobadas.
Cómo es la Boleta Única de Papel
El diseño aprobado por la Cámara Nacional Electoral (CNE) organiza a los partidos políticos en columnas (verticalmente) y los cargos en filas (horizontalmente).
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Cada categoría electoral contará con una casilla en blanco para que el votante seleccione su opción preferida.
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Los candidatos a senadores nacionales estarán identificados con su nombre, apellido y fotografía a color.
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En la lista de diputados nacionales, se deberán incluir al menos los cinco primeros nombres de la nómina.
Es importante destacar que existirá dos modelos de boleta, dependiendo de la jurisdicción: uno incluirá senadores y diputados (en las provincias que eligen bancas en la Cámara Alta) y otro será exclusivo para diputados nacionales.
Todos los pasos para votar con la BUP
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El elector recibe la boleta con la firma de la autoridad de mesa y una lapicera.
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En la cabina de votación, marca con una tilde el casillero de su elección (una sola opción por categoría).
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Dobla la boleta por la línea punteada y la introduce en la urna.
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Firma el padrón y recibe la constancia de voto junto con su DNI.
Cuáles son las ventajas de la Boleta Única
Entre los principales beneficios de este sistema se destacan:
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Mayor transparencia, al prevenir el robo o la falta de boletas en el cuarto oscuro.
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Igualdad en la oferta electoral, puesto que todos los partidos están representados en una única boleta.
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Menor costo de impresión, al sustituir millones de boletas partidarias por un único modelo oficial.
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Facilidad de uso, gracias a un diseño claro y estandarizado.
