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El distrito que conduce el peronista Gustavo Bordet empezó arecibir con más fuerza el impacto del rebrote de Covid-19. Cuando la curva decasos logró un amesetamiento en el AMBA, empezó a subir lentamente en EntreRíos. La localidad más afectada es Paraná, donde, según el último informe delministerio de Salud local, quedan 13 camas en Terapia Intensiva.
La provincia tiene un promedio de 500 casos diarios y unsistema sanitario que está tensionado. Es decir, que está sufriendo una presiónconstante por la cantidad de internaciones que hay, sobre todo en las salas decuidados intensivos. A nivel provincial la ocupación de camas UTI está en un73,53%. Quedan 71 camas disponibles. Para los intensivistas el margen es muypoco teniendo en cuenta la velocidad en la que se están registrando loscontagios.
En diálogo con Infobae, Carina Reh, Secretaria de Salud deEntre Ríos, explicó al detalle cómo es la situación actual. “El sistema desalud provincial está trabajando bajo mucho estrés. La situación epidemiológicaes muy agresiva. Y en esta oportunidad hay más internados por otraspatologías”, sostuvo.
Lo que retrata Reh es un problema que están sufriendo entodo el país. En el inicio de la pandemia todos los sistemas de salud delinterior del país fueron preparados para recibir pacientes con Covid-19. Sesuspendieron las intervenciones quirúrgicas programadas, se equiparon loshospitales y se restringió la circulación, lo que generó una disminuciónnotable en los pacientes internados por lesiones ocasionadas en los accidentesde tránsito.
Esta segunda ola impacta de lleno con un escenariototalmente diferente. Las restricciones son mínimas comparadas con las queexistían el año pasado y el nivel de circulación es muy alto. En ese contexto,los hospitales tienen menos disponibilidad para atender a pacientes concoronavirus.
Detrás de ese costado sanitario hay una decisión políticaque ha sido cuestionada por el gobierno nacional. Los gobernadores evitarontomar medidas en paralelo a las que indicó Alberto Fernández para el AMBA paraevitar pagar un costo político en sus provincias. La política y la salud estánentrelazadas en forma permanente. Mucho más a pocos meses de las elecciones.
La semana pasada Bordet decidió suspender las clases presenciales.La reacción de la sociedad fue inmediata. Hubo manifestaciones en contra de lamedida en las ciudades principales. La decisión del gobierno local duró unasemana. El último lunes los chicos volvieron a las aulas. No es el primergobernador que prefiere mantener las escuelas abiertas más allá de que generenmayor circulación en las calles.
Entre Ríos está dividido en cuatro regiones sanitarias. Enla Región I, donde está Paraná, Diamante, Victoria, Nogoyá y La Paz, elporcentaje de ocupación de las camas de terapia intensiva es del 77,17%. En esaregión está concentrado la mayor disponibilidad de camas. El sistema de saludtolera a los pacientes que viven en esa región y también a los de otrasciudades que no están incluidas en ese marco sanitario que se generó para lapandemia.
Otra de las regiones más afectada es la Región III, dondeestán los departamentos de Concepción de Uruguay, Colón y Rosario del Tala.Allí la ocupación de camas UTI alcanzan el 78,57%. En la Región II, que incluyea Concordia, Feliciano, Federal, Federación San Salvador y Villaguay, laocupación de camas de cuidados intensivos es del 68,97%, mientras que la RegiónIV, donde están los departamentos de Gualeguaychú, Gualeguay e Islas, laocupación es de 63,41%.
El impacto de la segunda ola puede verse también en laocupación de camas de terapia intensiva exclusiva de pacientes con Covid-19.Hasta hace un mes ese tipo de pacientes ocupaban el 20% de las camasdisponibles. En la actualidad la ocupación está por encima del 50%. La mayoríade los que ingresan a las terapias tienen entre 45 y 60 años.
“Estamos viendo pacientes muy jóvenes. La mayoría de ellossin comorbilidades, lo que aumenta la gravedad de los casos. Están entrando alos cuidados intensivos más rápido que antes. La evolución de muchos pacienteses desfavorable y el nivel de camas está al límite en forma permanente”,explicó la secretaria de Salud entrerriana.
Frente a la complicación del sistema sanitario la semanapasada el gobernador entrerriano le pidió al gobierno de Alberto Fernández másrespiradores. Siguió el mismo camino que su par de Santa Fe, Omar Perotti, quevisitó la Casa Rosada para pedir auxilio frente a un posible colapso sanitario.En este caso, Bordet se llevó 9 respiradores de Balcarce 50.
Previo a ese pedido, el gobierno provincial había sumado 4camas para cuidados intensivos y 12 camas para internar a pacientes con cuadrosmoderados. En Entre Ríos creen que lo peor aún no llegó y con los casosactuales ya tienen el sistema sanitario al límite. Conviven todos los días conel temor al colapso.
“Estamos viendo una evolución agresiva de la enfermedad quetiene que ver con las variables de la cepa. La velocidad de contagio es muchomás rápido que la del año pasado. En nuestra provincia se identificaron estasvariantes de Manaos y Reino Unido”, aseguró Reh a este medio. El personalsanitario está protagonizando una película de terror distinta a la del añopasado, y lo padecen todos los días.
Además del impacto en el sistema sanitario, las autoridadesde Salud de la provincia asumen que la sociedad entrerriana aún no tomó realdimensión del peligro de la segunda ola de coronavirus. Lo demuestran en elcomportamiento diario. Falta más cuidado.
Todas las semanas la situación epidemiológica se complica ydesde el ministerio de Salud hacen malabares, con traslados interregionales ydel sistema público al privado, para intentar cuidar a todos los enfermos. Lasituación es crítica y muchos aún no se dieron cuenta. Mientras tantos lascamas de cuidados críticos empiezan a escasear.
Una de las políticas sanitarias que dio resultado en laprovincia fue la vacunación de adultos mayores en el inicio del plan devacunación. Decidieron vacunar a todos los adultos mayores que viven en las 300residencias geriátricos que hay en Entre Ríos y en los 21 hospitalesgeriátricas.
El coordinador General de la Unidad Ministerial de Programasy Políticas de Salud para Personas Mayores, Esteban Sartore, se lo explicó aInfobae. “Somos la tercera provincia con más cantidad de adultos mayores en lapoblación. La política nuestra fue empezar inmunizando a ellos. Fuimos a todaslas instituciones”, indicó.
“La segunda ola nos encuentra con todas las personas queestán en los geriátricos vacunadas. Son 4000 adultos mayores en lasinstituciones. Así se evitó que haya brote en esos centros y se propague entrela gente de mayor edad”, explicó el médico gerontólogo.
En lo que respecta a la vacunación, hasta última hora deayer Entre Ríos había recibido 353.301, de las cuales fueron aplicadas 261.019.Al igual que todo el país, la mayoría recibió solo una dosis. Fueron 216.930personas, mientras que 44.089 tiene las dos dosis aplicadas.
Desde que comenzó el operativo de vacunación se vacunaron26.986 que forman parte del personal de Salud, 3.938 adultos mayores que vivenen geriátricos, 250 que están en hospitales monovalentes, 86.104 adultosmayores de 70 años, 18.438 que forman parte del personal estratégico, entreellos docentes y fuerzas de seguridad, 69.815 de entre 60 y 69 años y 15.587 deentre 18 y 59 años con factores de riesgo.
Durante el diálogo con Infobae, Reh describió lo que sientenlas autoridades de salud y muchos médicos con los que comparten el día a día,cuando ven la falta de cuidados que hay en la sociedad entrerriana.
Fue una frase. Con cansancio en la voz, dijo: “Te daimpotencia y te genera preocupación. Uno se repregunta si todo lo que hicimoshasta acá está bien hecho. También nos preguntamos qué más podemos hacer. Todoslos días tratamos de que ningún paciente deje ser atendido. Así vivimos.Necesitamos el compromiso de todos”.