Jueves, 29 de mayo de 2025   |   Campo

Tensión entre productores por el deplorable estado de un camino alternativo tras el colapso de la ruta 9

Tensión entre productores por el deplorable estado de un camino alternativo tras el colapso de la ruta 9

Luego del intenso temporal de lluvias que afectó al noreste de Buenos Aires el 16 de mayo y provocó el cierre de un tramo de la ruta nacional 9, que conecta Rosario y Buenos Aires, la Sociedad Rural de San Pedro manifestó su “más profunda preocupación” y denunció la “lenta, descoordinada y desprolija” respuesta de las autoridades tanto nacionales como provinciales. La entidad calificó la situación como una muestra de “terrorismo vial” y “decadencia estructural”, argumentando que hay “enormes contratiempos” para el tránsito y miles de personas expuestas a situaciones de riesgo.

“El peligro cotidiano al que se enfrentan quienes deben transitar por la zona es inadmisible”, destacaron desde la entidad ruralista en un comunicado.

Se advirtió que hasta el momento, la única alternativa habilitada, la ruta provincial 41, “ya era una trampa mortal en condiciones normales. Hoy, al convertirse en la única vía viable, se encuentra colapsada, sin el mantenimiento adecuado, con señalización insuficiente y sin controles eficaces que garanticen la seguridad”.

Asimismo, expresaron su indignación por la “casi total ausencia de trabajos reales en el lugar del corte”. Informaron que en la zona afectada hay “poco personal, mirando sus celulares, mínima maquinaria en operación y una señalización lamentable”.

Otra crítica severa se dirigió a la falta de información oficial. “No existe información concreta sobre los plazos de reparación, ni un mínimo nivel de exigencia hacia los concesionarios y los gobiernos que deberían estar brindando respuestas inmediatas”, cuestionaron.

La entidad consideró que lo que está ocurriendo es una clara manifestación de “desidia, ausencia del Estado y desprecio por la vida y el trabajo de los ciudadanos”, desembocando en “una expresión concreta del ‘terrorismo vial’ y la decadencia estructural que denunciamos”.

Como punto de comparación, señalaron que “pretender operativos urgentes, coordinados y eficaces, como los que se observan ante catástrofes en otros países, parece ser en la Argentina de hoy mucho más que una utopía: es una ficción”.

En este contexto, hicieron un llamado urgente a las autoridades competentes, tanto del gobierno nacional como provincial, para que “tomen cartas en el asunto con la seriedad y la celeridad que la situación requiere”.

“La falta de acción está poniendo en riesgo vidas humanas. No hay más tiempo. No podemos seguir naturalizando lo inaceptable”, advirtieron.

“Se está comprometiendo el trabajo y la seguridad de miles de personas. La falta de gestión eficiente ante emergencias climáticas agrava aún más una situación que ya era crítica”, concluyeron. Este reclamo resuena con fuerza en una región clave para el agro, en un contexto de creciente malestar por el deterioro de la infraestructura vial en diversas áreas del país, y particularmente en la provincia de Buenos Aires.

Campana y Zárate también sufrieron inundaciones y la ruta 9 se vio afectada.

El productor Jacinto Amatriain expresó su descontento a través de un audio: “Mirá lo que sucede ahora en la ruta 41, llevo media hora parado aquí, hay una cola tremenda. Recién pasaron dos ambulancias; seguramente hubo un accidente en las vías o en el puente. Esto es gracias a quienes decidieron cortar el puente de Areco, lo cual no tiene sentido. Pido a las autoridades que vengan y evalúen si tiene lógica que esté cortada la ruta 9, una vía tan importante, y que tengamos que transitar de noche por esta ruta 41, que está hecha pedazos. La otra, que va a Zárate, está aún peor. Hay gente tirada en la banquina con los autos rotos”.

“Es una locura lo que están haciendo con las personas que deben usar la ruta 41 y todas las carreteras en tan malas condiciones que hay alrededor de la autopista”, añadió.

En la misma línea, otro productor de la zona relató haber visto un camión despistado en la banquina e intentaron ayudarlo. “Casi llegando a Areco vi cuatro autos con las ruedas reventadas en un pozo. Tuve que frenar abruptamente e incluso tirarme a la banquina por los camiones que venían de frente y se tiraban a pasar. La verdad, es un desastre”, concluyó.

Déjanos tu comentario: