
La presentación oficial en Taiwán del sistema de defensa aérea T-Dome, encabezada por Lai Ching-te y seguida por miles de asistentes, marca una nueva era en la estrategia tecnológica y militar de la isla.
Se trata de un sistema multicapa que combina innovación local con componentes internacionales. Inspirado en el Iron Dome israelí, incorpora herramientas de detección avanzada y capacidades de interceptación para responder a ataques con misiles y otros proyectiles.
La estrategia apunta a que el T-Dome actúe como una cobertura integral del espacio aéreo insular, optimizando el uso conjunto de estos recursos y articulándose con los misiles Patriot, suministrados por Estados Unidos, y los sistemas Sky Bow desarrollados en Taiwán.
La implementación prevé sensores de alta precisión y la conexión a las redes de alerta temprana existentes. Reuters detalló que el diseño prioriza tanto la coordinación entre subsistemas nacionales e internacionales como la flexibilidad para incorporar futuros avances tecnológicos.
El proyecto será financiado con un presupuesto especial que implicará un incremento gradual de la inversión en defensa. Según cifras citadas por AP, la propuesta oficial elevará el gasto a más del 3% del producto interno bruto en el próximo año fiscal y plantea como objetivo alcanzar el 5% para 2030.
Durante la presentación, el presidente Lai Ching-te dijo tener un objetivo claro. “El aumento del gasto de defensa tiene un propósito: Es una clara necesidad para contrarrestar las amenazas enemigas y un motor para el desarrollo de nuestras industrias de defensa”, afirmó el jefe de Estado, subrayando el papel económico como complemento del desafío militar.
El proyecto presupuestario se presentará antes de fin de año e incluirá las partidas esenciales para la ejecución plena del sistema.
Las actividades militares de China en aguas y espacios aéreos cercanos mantienen a la isla en estado de alerta permanente. DW reportó vuelos regulares de aviones de combate, desplazamientos navales y pruebas armamentísticas, lo que ha impulsado el fortalecimiento del entrenamiento y la inversión en respuestas ante amenazas emergentes.
Al mismo tiempo, el Ministerio de Defensa, además de modernizar medios tradicionales, incorporó programas específicos para enfrentar la proliferación de drones militares y de equipos no tripulados.
Bajo este contexto, China reaccionó sin demora. El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Guo Jiakun, formuló declaraciones a la emisora estatal CCTV, acusando a Taiwán de sostener una “falacia separatista” y advirtiendo que los intentos de mantener la independencia por la fuerza podrían conducir a un conflicto.
El evento de presentación del T-Dome coincidió con la conmemoración del levantamiento de 1911, que precedió la fundación de la República de China.
En ese marco, Lai remarcó la importancia de evitar la repetición de tragedias históricas y abogó por la paz y la estabilidad en el Indo-Pacífico.
(Con información de Reuters y AP)