En un principio, los trabajos debían quedar listos en abril pasado, pero luego se anunció que sería a mitad de año. Por estos días, se detectaron filtraciones en el hormigón de construcciones realizadas en el predio de Rondeau y Echeverría. Ahora trabajan en la solución. Las empresas que tienen a cargo la construcción de la planta potabilizadora de agua, centros de distribución y cañerías maestras en Paraná elevaron un pedido a la Nación, que financia en su totalidad la obra, la extensión del plazo de finalización de los trabajos. La nueva fecha de inauguración sería, entonces, mediados de septiembre. En realidad, y de acuerdo a los plazos de los pliegos de licitación, la obra debía estar lista para el 18 de abril último, pero ya el año pasado funcionarios municipales ampliaron ese período y hablaron de que la puesta en marcha de la megaobra sería en el primer semestre de 2007, más precisamente en julio. Pero esos pronósticos variaron por estos días, pues las firmas Degremont-Esuco que levanta la planta potabilizadora e Hidroconst-Isolux, que construye los centros de distribución e instala las cañerías maestras, elevaron una nota al Ente Nacional de Obras Hídricas y de Saneamiento (Enohsa), organismo que tiene a cargo la administración de los fondos y el control de los trabajos. Así lo informó Oscar Schuster, ingeniero delegado del Enohsa, quien dijo a EL DIARIO que entre los motivos expuestos por las contratitas figuran las copiosas lluvias caídas en marzo y parte de abril. De todas formas, aclaró que están a la espera de la repuesta del Ente Nacional.Por su parte, José Martínez, secretario de Obras Públicas de la Comuna, se refirió al nuevo plazo y señaló que “teóricamente la planta debería estar inaugurándose en septiembre”. Al explicar la demora, apuntó que hubo 72 días de lluvias y sumó las consecuencias de las medidas de fuerza realizadas por operarios de la planta en la segunda quincena de abril. En la oportunidad, unos 350 trabajadores que desarrollaban tareas en el predio ubicado en las calles Rondeau y Echeverría, donde se construye la planta potabilizadora, iniciaron medidas de fuerza debido a que una subcontratista había tomado operarios extranjeros y de la provincia de Santa Fe, sin considerar la oferta de mano de obra local. La medida se extendió durante unos días. Así y todo, Schuster estimó que la ejecución de la obra es de un 75 % del proyecto. INCONVENIENTES. A la postergación de los tiempos de obra, se agregó otro ingrediente: la detección de fallas en el hormigón de algunas instalaciones de la planta. Se trata de filtraciones, que están requiriendo ahora un tratamiento especial. Al respecto, Schuster informó que actualmente se está aplicando un producto de origen norteamericano y que habrá que esperar la evolución del procedimiento para, luego, someter a las instalaciones a pruebas hidráulicas, lo que demandará grandes volúmenes de agua. Todo eso requerirá también unos cuantos días, anticipó. Consultado sobre las causas de las falencias, el representante del Enohsa en Paraná explicó que “el hormigón no es impermeable”, y que son “dificultades que hay que tratarlas y que pueden aparecer en una obra”.Así las cosas, el profesional aclaró que ante este tipo de inconveniente, el Ente exige que “todas las estructuras de la planta potabilizadora que almacenen agua, sean estancas. Para lograr ese cometido se somete a una prueba hidráulica, se cargan de agua, y se verifica que no tengan pérdidas”, dijo.Para destacarCómo fue. La obra de la nueva planta de agua para Paraná fue gestionada ante la Nación por el Gobierno municipal. Fue en los primeros meses de 2004 y rápidamente obtuvo el compromiso de la Nación. En ese momento, se mencionaba que la inversión rondaría los 43 millones de pesos; luego, con el paso del tiempo, esa suma se fue incrementando hasta aproximarse a los 80 millones, según la última información. De qué se trata. Consiste en la construcción de cuatro centros de distribución en puntos altos de la ciudad: barrio Policial, Parque del Lago, Cristo Redentor y General Espejo. Así, se anunció que la obra garantizará el suministro a toda la ciudad de agua dulce hasta 2027, pudiéndose eliminar unos 34 pozos que provén agua salada. Se informaba en 2004 que los trabajos iban a demandar dos años de ejecución, una vez concretado el proceso de licitación y adjudicaciónTiempos. En febrero de 2005 se realizó la licitación. Resultaron ganadoras la Unión Transitoria de Empresas (UTE) conformada por Degremont SA y Esuco SA para la ejecución de la planta potabilizadora. La firma del contrato fue el 20 de abril de 2005 y el monto era de 51.054.587,46 pesos. En tanto, los centros de distribución y demás instalaciones quedaron en manos de la contratista Isolux. Se firmó el contrato el 27 de mayo de 2005. La inversión fue estimada en 27.445.757,66 de pesos. La información fue proporcionada por la Dirección de Obras Sanitarias, en agosto de 2006.Sin novedades respecto de la “reconversión” de Obras SanitariasEl proyecto nacional de la construcción de la obra del agua en Paraná contemplaba también la “reconversión” del manejo administrativo y gerencial de la prestación del servicio por parte de la Dirección de Obras Sanitarias de la Municipalidad. Las modificaciones, que hasta ahora no estarían definidas, debían adoptarse con antelación a la finalización de la construcción de las instalaciones, pues la intención era que la obra comenzara a funcionar ya con otro contexto administrativo o de gestión. Para eso se había mencionado, desde la Nación, el firme propósito de introducir cambios a la repartición en cuestión y brindar capacitación al personal del área. Todo se iba a dar progresivamente en el tiempo, en sintonía con el avance de la obra de ingeniería y con la participación de las entidades gremiales. En julio de 2006, esa tarea se anunciaba con un comienzo inminente; sin embargo, ya transcurrieron 11 meses y los gremios no han recibido ningún llamado ni tienen noticias al respecto.Justamente, un primer paso del proyecto de reconversión empezó a encaminarse en el primer semestre del año pasado, cuando llegó a la ciudad una consultora platense contratada por el Enohsa para realizar una evaluación de la situación de los servicios y del área prestadora (Obras Sanitarias). El informe elaborado por la consultora 5 de Septiembre SA arrojó resultados demoledores. Por ejemplo, advertía un alicaído nivel de recaudación, la existencia de controles deficientes, la escasa protección de los usuarios y describía una andanada de designaciones de personal realizadas a partir de 2004, en el inicio de la actual administración. También remarcaba la falta de planeamiento: “Se resuelve el día a día”, alertaba, y abundaba en la mención de fallas de gestión, entre otras cuestiones. La investigación se basó en el análisis de distintos aspectos: tarifas, personal, facturación y recaudación, costos operativos, organización de la Dirección.Esos resultados, que pintaban un panorama desalentador del servicio y del funcionamiento y gestión de la repartición, se plantearon como la base necesaria para comenzar la segunda etapa referida a la definición del futuro del área. Y de ese debate iban a participar los gremios. (El Diario)
