SANTIAGO DEL ESTERO.- A través de un decreto, el gobernador de esta provincia, Gerardo Zamora, eximió al sector agropecuario del pago de ingresos brutos por un periodo de seis meses, a raíz de la sequía que afecta al territorio en las últimas semanas.
La actividad primaria no tributará este impuesto desde el 1º de julio hasta el 31 de diciembre del año 2025. Esta decisión se tomó tras un pedido de diversas organizaciones rurales que manifestaron la crisis que atraviesa el sector debido a la sequía, sumando a esto la caída sostenida de los precios de los granos y la reducción en los volúmenes de venta. Zamora consideró que las condiciones climáticas extremas han provocado una pérdida “significativa” en la productividad, así como una disminución de los ingresos reales que afecta “su capacidad contributiva” y pone en riesgo la “sostenibilidad de numerosas explotaciones rurales”.
En otro apartado del decreto se destacó que “resulta necesario implementar medidas fiscales excepcionales y transitorias que alivien la carga tributaria, contribuyendo a la recuperación del sector productivo más sostenible de la provincia”.
El propio Zamora compartió en sus redes sociales la publicación de la cuenta oficial del gobierno santiagueño, donde se mostraba el decreto y sus alcances. Añadió que “después de conversar con distintos sectores del campo y evaluar la situación, hemos decidido, por un término de seis meses, a partir del 1 de julio, suspender el cobro del impuesto a los ingresos brutos para la producción primaria en todo el territorio de la provincia de Santiago del Estero”.
En los “considerandos” del decreto se subrayó que “las condiciones climáticas han generado una pérdida significativa en la productividad de pequeños y medianos productores, impactando directamente en la economía regional, y que por ello el Estado debe asumir un rol activo para sostener la economía real en contextos de crisis”.
Los productores ganaderos tuvieron que conseguir agua para la hacienda ante la falta lluviasGentileza
Los cultivos afectados incluyen trigo, arroz, maíz, alfalfa, soja, entre otros, así como la cría de ganado vacuno, porcino, ovino, equino y caprino, todos detallados en el anexo dos del decreto.
En diálogo con LA NACION, el dirigente rural Juan Pablo Karnatz elogió la medida al afirmar que “es acertada en un momento muy complicado para el sector, considerando las medidas nacionales, como las retenciones, y esto es un aliciente, una palmada al productor”.
Karnatz aseguró que el campo santiagueño ha enfrentado “una situación complicada en el verano, que provocó la pérdida de cultivos y muy bajos rendimientos, especialmente en el este provincial”. Aunque no se disponen de cifras sobre pérdidas y productores afectados, “la realidad es que es mucho”.
El dirigente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) comentó que “también hay que considerar que es una economía alejada de los puertos, lo que eleva significativamente los costos de flete. Por lo tanto, esta medida no resuelve todos los problemas, pero es un gran apoyo, y los garbanzos se cosechan uno a uno; es una buena respuesta del gobierno provincial”.
Santiago del Estero se destaca a nivel nacional, siendo en la región la que más dólares aporta, con emprendimientos agrícolas y ganaderos que la posicionan entre las diez principales provincias del país en cuanto a exportaciones a destinos como China, Medio Oriente y el Mercosur, que capturan el 82% de las exportaciones desde Santiago del Estero. El resto se dirige a la Unión Europea, Estados Unidos, México y Canadá.
