
La imagen provoca cierta vergüenza ajena. Capturada esta mañana en Villa Celina, La Matanza, muestra a Javier Milei acompañado por varios de sus candidatos, todos vestidos de violeta, al inicio de la campaña en territorio bonaerense. Junto a él, los libertarios, que han adoptado este color, están también Cristian Ritondo y Guillermo Montenegro, quienes provienen del PRO. Por su parte, Patricia Bullrich puede lucir el tono sin inconvenientes, ya que se ha afiliado a La Libertad Avanza. Pero, ¿realmente les exigen tanto a los amarillos puros?
La imagen de los macristas disfrazados con el color de sus colonizadores revela la dureza de la política. Más que un acuerdo entre partes iguales, esta fotografía refleja una anexión. Un sometimiento que, desde el exterior, se percibe como humillante. Las formas públicas de este pacto entre amarillos y libertarios son igualmente elocuentes. El espacio se llama… La Libertad Avanza, y el color impuesto, como mencionamos, es el violeta. Cualquier persona que desee pertenecer, debe adoptar este color.
La historia detrás de cómo se llegó a este acuerdo es fascinante. Tras la derrota de Mauricio Macri en CABA ante los libertarios liderados por Manuel Adorni —en medio de un video falso—, el ex presidente se alejó de la escena y se fue de viaje por el mundo durante dos largas semanas, dejando la negociación de las listas bonaerenses en manos de Cristian Ritondo, jefe de los diputados del PRO. En medio de este tira y afloja, se cuenta que Karina Milei preguntó al negociador si Macri podría tener objeciones a las condiciones del acuerdo o si se arriesgaba a patear el tablero y desconocer lo pactado en el último momento. Ritondo la tranquilizó: “Eso no va a pasar”. Por ello, la hermana del Presidente avanzó con sus exigencias, al entender que los amarillos ya estaban dispuestos a ceder. Hasta hay quienes afirman, como Carlos Pagni, que Ritondo pidió para sí mismo la SIDE, pues no integraría las listas. Los amarillos querían cambiar de color.
Por otro lado, Guillermo Montenegro, el otro macrista en la fotografía violeta, ha sido objeto de rumores durante un tiempo, ya que se dice que el intendente de Mar del Plata busca unirse al oficialismo. Su candidatura en la Quinta Sección y la imagen de esta mañana parecen confirmarlo.
Otro amarillo que medita pasarse de bando es el diputado Diego Santilli, quien aspira a un lugar en las listas de octubre para renovar su banca en la Cámara Baja. Cercanos a Karina Milei, la responsable de las decisiones, rememoran una escena insólita que el diputado desmiente. Dicen que su primer pedido a la hermana del Presidente fue: “Yo doy el salto, pero quiero el primer lugar de la lista”. La respuesta de Karina fue: “Vos da el salto, el lugar después lo vemos”. Su segundo pedido fue más modesto: “Yo doy el salto, pero quiero estar entre los cinco primeros lugares”. Nuevamente, la respuesta de Karina fue: “El lugar después lo vemos”. El último pedido de Santilli, según los karinistas, ya sonaba a capitulación: “Bueno, yo doy el salto, vos después definí el lugar mío”.
A Karina le gusta hacerse rogar y pintar a todos de violeta.