Tras semanas de versiones contrapuestas y luego de desmentir una nota del Wall Street Journal, el ministro de Economía, Luis Caputo, reveló finalmente que mantienen negociaciones con bancos internacionales por un nuevo crédito de entre USD 6.000 y USD 7.000 millones. Añadió que la decisión dependerá de la evolución del riesgo país, sobre la cual cuentan con un pronóstico para las próximas semanas o meses.
“Nos han ofrecido los bancos entre USD 6.000 y USD 7.000 millones y veremos cuánto de eso les tomamos, por ahí cero, por ahí 1.000 millones, por ahí USD 2.000 millones o por ahí USD 3.000 millones. Estamos viendo las diferentes alternativas”, afirmó Caputo durante su participación ayer en el evento del Consejo Interamericano de Comercio y Producción, en el Hotel Alvear.
“Estamos viendo las diferentes alternativas porque en otras cosas creemos que en los próximos meses o semanas va a haber una compresión fuerte del riesgo país”, agregó, sin detallar las razones. Tampoco lo hicieron las fuentes consultadas por este medio para esta nota.
Al inicio de su presentación sostuvo que están en el “mejor momento del mandato”, tras la revalidación del modelo en las elecciones legislativas, y remarcó que ahora el Gobierno cuenta con más diputados y senadores —aunque sin mayoría automática— para impulsar cambios en el Congreso. Sin embargo, aún hay gobernadores que aguardan las modificaciones al presupuesto 2026 y las esperadas reformas laboral y tributaria.
Para el director de Eco Go, Sebastián Menescaldi, se requeriría un paquete de medidas para lograr que el riesgo país caiga. “Debería ser una combinación de mostrar fuerza política, asegurar el pago de bonos de enero y empezar a acumular reservas para los futuros pagos”, afirmó. Además, aseguró que sería conveniente recalibrar el esquema de bandas, porque eso podría hacer más atractivas las inversiones.
Aunque después de las elecciones legislativas el dólar mayorista se estabilizó, este jueves cotiza en $1.448, a $64,99 del techo de la banda ($1.512,99). Es una distancia que los analistas consideran corta y que deja al régimen cambiario vulnerable frente a cualquier shock interno, externo, político o económico. A pesar de ello, ayer Caputo, frente a empresarios, se mostró errático en este punto: “Vamos a seguir con el esquema de bandas, alguno creerá que se puede flotar libremente y es oponible”, marcó.
En la consultora Analytica sostienen que el Gobierno apuesta a mejorar las expectativas con la renovación en el Congreso, con la que buscará aprobar el presupuesto y las reformas estructurales, y de ese modo reducir el riesgo país para poder volver a los mercados internacionales.
En uno de sus últimos informes consideran probable que vuelvan a recurrir al swap con Estados Unidos para afrontar los vencimientos que quedan hasta febrero: USD 1.478 millones con organismos internacionales y el propio FMI, además de los USD 4.200 millones correspondientes a pagos con tenedores privados y USD 2.000 millones en BOPREAL.
“Lo que Caputo marcaba era lo de las reformas. Él entiende que ahora que va a cambiar el Congreso y se puedan agilizar el presupuesto y las reformas, eso sería una buena señal de continuidad del rumbo económico que debería ayudar a bajar el riesgo país”, sostuvo el director de C&T Asesores Económicos, Camilo Tiscornia. Al mismo tiempo, advirtió que hay que prestar atención a lo que ocurra en diciembre con la demanda de pesos.
“Está el tema que próximamente van a informar este financiamiento. Esto genera la expectativa de que en diciembre, que suele haber mucha demanda de pesos, es probable que la gente se tenga que desprender de dólares y que, tal vez, aparezca la oportunidad de empezar a comprar reservas”, comentó. Desde la salida del cepo hasta octubre, con una aceleración en los dos meses previos a la elección, los argentinos compraron más de USD 20.000 millones, según datos del Banco Central (BCRA).
Durante octubre, mes de las elecciones legislativas, los argentinos adquirieron dólares por USD 4.669 millones, cifra inferior a septiembre, cuando se alcanzaron USD 5.080 millones, un récord desde 2018. Pero si se mantiene la regla autoimpuesta —en el piso compra el BCRA y en el medio el Tesoro—, la compra en el último mes del año se complica por el nivel de depósitos en pesos y los vencimientos de deuda pública.
El Gobierno enfrenta en diciembre vencimientos de deuda en pesos que superan los $40 billones, uno de los mayores desafíos financieros del año. Aunque más de la mitad de lo que vence corresponde a endeudamiento intra sector público, lo que modifica la complejidad del panorama inmediato.
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