Policía malo-policía bueno: Javier Milei despotrica contra gobernadores y Guillermo Francos tiende puentes con dialoguistas

El pasado jueves, el oficialismo sufrió un golpe en la Cámara alta, donde se aprobó entre otros el aumento del bono jubilatorio, la prórroga de la moratoria previsional y la emergencia en discapacidad. Pese a que el Jefe de Estado apuntó con dureza contra los gobernadores por apuntar contra el equilibrio fiscal, en Balcarce 50 admitieron ante una consulta de Ámbito que el diálogo con los mandatarios provinciales “no está roto”.

En esta línea, en el entorno del jefe de Gabinete, Guillermo Francos, no descartan convocar a los dialoguistas en el corto plazo. Si bien todavía no hay una fecha definida, aseguran que la intención está, y que hay una suerte de “semáforo de gobernadores”, muchos de los cuales están identificados como “color verde”, es decir, de buen vínculo con el Ejecutivo.

En este color podrían enmarcarse por ejemplo Alfredo Cornejo (Mendoza), a quien el Gobierno recibirá en los próximos días con motivo del Consejo de Mayo; Rogelio Frigerio (Entre Ríos) y Leandro Zdero (Chaco), quienes aportaron ausencias ausencias a la sesión del jueves, e Ignacio Torres, quien ordenó a sus senadoras que se abstengan de votar -salvo la Ley de Emergencia en Discapacidad-.

Esta semana, con motivo de la 137° Exposición Rural el jefe de los ministros pisará el predio de la SRA en Palermo -presumiblemente el jueves- en donde se cruzará con algunos de los gobernadores. Si bien la ocasión no se presta para abordar la tensa agenda entre ambas terminales, sí puede funcionar para romper el hielo. En la misma línea se lee la reunión de Milei con la Mesa de Enlace, que llega en momentos en los que acaba de expirar -el 30 de junio- la ventana de reducción temporal de retenciones a la exportación de soja y maíz, y cuando varias de las provincias con fuerte industria agrícola reclaman que la medida sea permanente.

El Gobierno juega a “policía malo, policía bueno” y confunde a los gobernadores

Como contó este medio, en el Ejecutivo remarcan que las provincias “necesitan” del Gobierno nacional. “Nosotros también los necesitamos a ellos”, agregan. En ese sentido, argumentan que hay una suerte pacto implícito de “policía bueno, policía malo”, entre Francos y Milei. Vale recordar que el Presidente dijo el 9 de julio en una entrevista radial que los gobernadores “quieren destruir al Gobierno nacional” y “romper el país”; sin embargo, en Casa Rosada minimizan sus expresiones y aclaran que el mandatario “nunca va a dejar de ser como es”. En el oficialismo consideran que su verborragia es un activo político y que son otros los actores políticos que deben tender puentes con las provincias, tales como el Jefe de Gabinete.

Por caso, este último dijo el fin de semana que el Poder Ejecutivo “va a conversar” con gobernadores para lograr “sostener el veto” de los proyectos que fueron convertidos en ley el jueves pasado en el Senado, y adelantó que hay mandatarios provinciales que “quieren acordar con nosotros”.

“El gobierno está permanentemente conversando con los gobernadores, yo mismo dialogo permanentemente”, dijo Francos, aunque admitió que toda negociación está enmarcado por el “clima electoral” de este año.

En declaraciones televisivas, Francos, ratificó que el Presidente “vetará las leyes” sobre jubilaciones y discapacidad y aclaró: “Nuestra intención, en primera instancia, es sostener el veto”. Al mismo tiempo, señaló que las reuniones van a ser “con varios” mandatarios provinciales y aseveró que “hay gobernadores que saben que Milei está muy bien en sus provincias y quieren acordar con nosotros”, pero recalcó que “estamos negociando en un clima propio de un momento electoral”.

No obstante, Francos no es el único interlocutor con gobernadores actualmente, ya que el asesor de Karina Milei, Eduardo “Lule” Menem, también oficia de canal de diálogo con las provincias y mantiene marcadas diferencias a respecto con el alfil presidencial Santiago Caputo.