Antes del comienzo de los alegatos, las partes pudieron escuchar el testimonio de un quiosquero y de dos amigos del imputado que presenciaron el homicidio. Uno de los amigos del acusado terminó detenido por haber incurrido en el supuesto delito de Falso Testimonio. El tribunal integrado por Teresita Nazar, Raúl Herzovich y Jorge García, fijó para el lunes la lectura del veredicto.
Alegatos
Los primeros en exponer fueron los abogados querellantes Walter Rolandelli y Roque Londra, quienes basaron su pedido de 13 años de cárcel en los testimonios del quiosquero Elvio Molina y del amigo del imputado Luis Horacio Bustos.Ambos coincidieron en que “Durán sacó un revólver de entre sus ropas y ejecutó a Gutiérrez”. Estos testimonios valorados por la querella echan por tierra los dichos de Durán que reconoció haber disparado contra Gutiérrez, pero en respuesta a la agresión de la víctima. Además, el imputado dijo que el arma pertenecía a Carlos Alberto Álvarez (ver aparte) algo que su propio amigo Bustos negó ayer rotundamente.
Rolandelli y Londra, en su afán por desvirtuar posibles pruebas utilizadas por la defensa del imputado alegaron que el dermotest en las manos de Gutiérrez no dio resultado positivo, ya que falta uno de los tres metales que quedan en las manos cuando se efectúa un disparo. Para la querella, la víctima tiene dos metales en sus manos producto de que las colocó en actitud defensiva.
A su turno, expuso el fiscal de Cámara José María Chemes quien peticionó 12 y 10 meses de cárcel. Como es costumbre el representante del Ministerio Público realizó una profunda valoración de las pruebas obrantes en la causa. Para Chemes, el encartado no respondió a una agresión de la víctima. Además señaló que los testimonios de Molina y Busto son coincidentes. Y que varios de los disparos que recibió Gutiérrez fueron por la espalda. Para pedir la condena tuvo como atenuantes la edad del acusado y que es padre de un chico de un año.
Legítima defensa
Por último expusieron los abogados defensores Miguel Retamoso y Miguel Cullen quienes pidieron la absolución por entender que Durán actúo en legítima defensa.
A criterio de los defensores, el hecho se inicia por un disparo de la víctima contra su pupilo, ante lo cual Durán no podía tener otra actitud que responder la agresión. Dicha versión no surgió de los testigos, pero los defensores se basaron en la prueba de dermotest practicada a Gutiérrez que arrojó resultados positivos y a su entender es objetiva.
Asimismo indicaron que Gutiérrez contaba con un frondoso prontuario entre los que se destaca el abuso de arma.
Por otra parte señalaron que hay un error en la conclusión de la autopsia, ya que, pese a que en el desarrollo se alude a que los disparos fueron recibidos de frente, en la conclusión, aparentemente por un error de tipeo, se dice algo contrario.
Antes de finalizar su defensa Cullen y Retamoso pidieron que para el hipotético caso de condena se le aplique una sanción que amerite las circunstancias desencadenantes del hecho, ya que Gutiérrez agredió a Durán con armas de fuego, lo golpeó y obligó a sus familiares a huir del barrio Giachino. Incluso, luego de que se fueran, Durán recibió un tiro en la pierna y su casa fue tiroteada por allegados a Gutiérrez. (Uno)
