
El jefe de la Dirección de Investigaciones de la Policía de Entre Ríos, Horacio Blasón, se refirió al trabajo policial que llevó a la incautación de dos ametralladoras y un arma calibre 9mm en el barrio Paraná XVI de la capital provincial.
En declaraciones al programa A Quien Corresponda (Radio Plaza 94.7), Blasón afirmó que “es una preocupación de la policía, los fiscales y toda la sociedad, y esto demuestra el resultado del trabajo policial y judicial en la represión del delito. Son investigaciones que se han realizado durante mucho tiempo; somos conscientes de que no estamos ajenos a lo que sucede en todas partes, en todas las provincias.”
Aseguró que “en Paraná se ha trabajado intensamente en prevención e investigación, en colaboración con todas las áreas de la policía y las fiscalías, para poder frenar esta clase de hechos que afectan tanto a la sociedad. Es una respuesta que se ha dado a lo largo del año, con numerosas armas incautadas e investigaciones en curso, en las que se han aportado pruebas e indicios a la Fiscalía para llevar adelante las acusaciones.”
Como ejemplo, recordó que “el año pasado se realizó una investigación muy significativa, en la que se allanó una armería que, de forma irregular, proporcionaba armas a personas que las adquirían legalmente, pero que posteriormente eran introducidas en el mercado ilegal y utilizadas para cometer delitos. Allí hubo personas detenidas.” “Es un trabajo constante, continuo, que está dando resultados satisfactorios, como se evidenció anoche, gracias al trabajo de la Jefatura Departamental Paraná, con la incautación de tres armas de grueso calibre. Estos elementos son puestos a disposición de la Fiscalía y forman parte de las investigaciones que culminan con la detención de individuos que serán juzgados por los delitos cometidos”, definió.
Consultado sobre el posible uso de esas ametralladoras, Blasón mencionó que “actualmente hemos experimentado una disminución sustancial en los homicidios; aunque se habla de armas de fuego y balaceras que pueden estar vinculadas, el 90% de los homicidios son problemas de convivencia o entre personas que ya se conocen. Existe otra problemática asociada a estas armas; ha habido balaceras que, sin duda, están relacionadas con un control territorial o con venganzas entre individuos, y tenemos indicios de que podrían haber sido utilizadas en este tipo de incidentes o disparos hacia un inmueble.” Precisó que “en lo que va del año, en Paraná se han secuestrado aproximadamente 200 armas de fuego; estas provienen de seguimientos: se utilizaron en un hecho, comenzó una investigación, hasta que se logró dar con el arma y las personas que las usaron. Todo esto es parte de una investigación que lleva adelante un fiscal junto con el personal policial.”
Por otro lado, confirmó que, aunque una persona logró escapar, “hay una pista” sobre el propietario de las armas. “Existen pistas, como en toda investigación, que deben ser probadas judicialmente. Hay muchos datos que no puedo revelar para no comprometer la investigación. Se cuenta con muchos elementos sobre quién podría haber tenido estas armas; hay una persona que se dio a la fuga y se está trabajando en ello. Este es un esfuerzo incansable que responde a medidas implementadas desde el comando superior de la policía; se están llevando a cabo múltiples estrategias de prevención e investigación para responder a la sociedad y presentar pruebas que permitan a las Fiscalías llevar adelante acusaciones adecuadas contra estas personas involucradas en estos hechos.”
En cuanto a la preocupación de la dirigencia política sobre este tema, el jefe policial evaluó que “a través del ministro de Seguridad y Justicia, Néstor Roncaglia, quien ha sido una ventaja sustancial para nosotros, ya que es policía y comprende esta problemática, hemos recibido directrices correctas y un gran apoyo al personal policial.” “Contamos con directrices muy claras para realizar nuestro trabajo y con el respaldo de la comunidad; vemos que confían en nosotros, notamos el apoyo de los vecinos, quienes se sienten satisfechos al vernos realizar estos procedimientos, lo que implica un esfuerzo constante,” refirió.
Por último, subrayó que “hay un trabajo en conjunto con los fiscales y no somos ajenos a la situación que se presenta en todo el país y en Latinoamérica, donde se han incrementado ciertos delitos, y quizás haya menos fiscales. Sin embargo, con la optimización de los recursos, la tecnología juega un papel fundamental; existen áreas de cibercrimen que participan e incorporan más análisis de datos y elementos probatorios. Es un trabajo complejo que apoya a los fiscales. La labor es muy coordinada y seguimos dando respuestas.”