
El Instituto Nacional de Seguridad Social, Jubilados y Pensionados (PAMI), presidido por Esteban Leguizamo, ha cerrado recientemente la tercera licitación más costosa del año, relacionada con la provisión, almacenamiento y entrega de pañales para sus más de 5.300.000 afiliados, aunque el padrón oficial incluye aproximadamente 250.000 beneficiarios.
La única empresa que se presentó al concurso público ofreció un monto de $466.554 millones, de los cuales la mayor parte corresponde al costo de los pañales, que son adquiridos a proveedores especializados y luego entregados a los afiliados de la tercera edad.
Las otras empresas del sector optaron por no presentar ofertas, acusando al PAMI de haber armado un proceso licitatorio exprés que introdujo cambios significativos en los requisitos sobre los tipos de pañales y la modalidad de entrega, lo que dificultó la preparación de la documentación necesaria dentro del plazo asignado.
Este tema cobró relevancia el fin de semana, lo que llevó al Gobierno a responder las críticas. Este lunes, el vocero presidencial, Manuel Adorni, brindó una conferencia de prensa en la que explicó las características del nuevo sistema de entrega de pañales, que, según estimaciones oficiales, podría generar un ahorro de $5.000 millones anuales.
El nuevo sistema y la respuesta oficial
Desde hace más de una década, el proceso de licitación se desarrollaba de la siguiente manera: la empresa ganadora del concurso (denominado provisión, almacenamiento, preparación, transporte, distribución y entrega de Higiénicos Absorbentes Descartables) adquiría pañales que debían cumplir con los requisitos establecidos por PAMI. Estos productos eran luego distribuidos a las farmacias donde los afiliados podían retirar los paquetes según lo indicado en su receta. Desde PAMI, se anunció que este procedimiento dejará de estar en vigor a partir del 1 de junio.
“Vamos a subsidiar a la demanda y no a la oferta,” afirmó un alto funcionario a Infobae. El nuevo sistema consistirá en la entrega de pañales directamente en el domicilio del afiliado, lo que busca mejorar la trazabilidad del inventario, algo que se complicaba con la distribución a farmacias. Adorni mencionó que este nuevo esquema previene que “alguien con mala intención quiera revender los productos en Marketplace.”
Aunque el costo de transporte aumentará, se considera que se verá compensado por un mejor control del stock, además de que los nuevos tipos de pañales son, supuestamente, más comunes en la industria.
A pesar de que este aspecto es central, desde la obra social afirmaron que los requisitos para los pañales fueron actualizados porque los anteriores eran obsoletos. “Los nuevos pañales cumplirán con la normativa de ANMAT. Son anatómicos en lugar de contar con apósitos, contienen geles de mayor calidad para la absorción y cumplen con los controles farmacéuticos exigidos por ANMAT. Se cuestionó el gramaje, pero eso no tiene fundamento, ya que no afecta la calidad de la prestación médica,” explicaron.
Según la versión oficial, el tipo de absorbente anterior estaba limitado a medidas que solo podían ser fabricadas por ciertos productores. Desde la Casa Rosada, se señala que el sector farmacéutico presenta prácticas de “cartelización,” lo que ha generado tensiones con la gestión sanitaria, que busca implementar cambios en la adquisición de medicamentos y vacunas. Adorni, además, fue enérgico al calificar de “conducta anticompetitiva” a las empresas que se opusieron al concurso.
En el Acta de Apertura de las ofertas, únicamente se registró la propuesta de Urbano Express, que resultó ganadora. Esta empresa tiene como socio fundador y principal accionista a Walter Roman, cuyo apellido está vinculado a un grupo especializado en logística y transporte. El segundo accionista, con el 30% del capital, es el Grupo Clarín.
Las tres empresas que solicitaron participar en el concurso, pero no presentaron ofertas, fueron Lenterdit, Italpañal e Hisan, todos conocidos en el sector. Estas empresas expresaron su insatisfacción por el tiempo limitado para ajustar sus propuestas a los nuevos requisitos, alegando que contaron con menos de una semana para hacerlo.
Según la información recabada por Infobae, la oferta fue publicada el 11 de abril en el sitio web de PAMI, la invitación a los proveedores inscriptos se realizó el 14, y el llamado formal al concurso apareció en el boletín de PAMI el 16, justo dos días después de la publicación oficial.
“La apertura de ofertas tuvo lugar el 25 de abril. No hubo seis días ni licitación exprés; las cámaras podrían haber intervenido y, sin embargo, no presentaron ofertas. La carta pidiendo prórroga llegó el mismo día de la apertura de sobres. Ya no podíamos impedirlo, ya que las solicitudes pueden hacerse hasta 24 horas antes,” aclararon desde el Gobierno.
El discurso oficial en redes
El anuncio de esta licitación fue inicialmente realizado por el periodista Jairo Straccia, lo que llevó a Manuel Adorni a comunicar a través de X un mensaje el domingo en el que afirmaba que se abordaría el tema: “Durante años, algunos aprovecharon para hacer negocios con los pañales del PAMI, obligando a los jubilados a utilizar productos de baja calidad.”
Adorni continuó: “Hemos puesto fin a esto: hemos implementado una licitación pública, con entrega directa y un ahorro de $5.000 millones. Hasta los pañales de los abuelos estaban siendo robados. Un verdadero escándalo. Mañana, en conferencia de prensa, daré más detalles.”
Además, Mario Lugones, ministro de Salud de la Nación, reforzó el mensaje de Adorni con una publicación en sus redes: “Vinimos a cambiar el sistema de salud, aunque a algunos no les guste.”
También añadió: “Desde que asumimos, nuestro objetivo ha sido reordenar y transparentar el sistema de salud para que las mejoras beneficien a los argentinos. La medida que impulsa este cambio en PAMI es un claro ejemplo. Los afiliados comenzarán a recibir pañales de mejor calidad y directamente en sus hogares. Y, para colmo, más baratos. Estamos convencidos de lo que hacemos. Aunque muchos intenten preservar sus privilegios, vamos por el camino correcto.”