La situación de la Obra Social de Entre Ríos (OSER) generó posiciones enfrentadas entre la Asamblea de Afiliados y el Gobierno provincial. Mientras los representantes de los afiliados advirtieron sobre una “grave situación” marcada por falencias administrativas y pérdida de prestaciones, desde la gestión oficial destacaron un proceso de ordenamiento, normalización y mejoras en la cobertura sanitaria.
Durante una conferencia de prensa, la Asamblea de Afiliados sostuvo que el escenario de la obra social se profundizó a lo largo del último año. En ese marco, cuestionaron el desempeño de la actual conducción y señalaron una administración “deficiente”, con “vaciamiento progresivo, demoras en la atención y una notoria falta de cobertura para los afiliados”.
Según expusieron, estas deficiencias se traducen en dificultades concretas para acceder a turnos, prácticas médicas, tratamientos y autorizaciones, con un impacto directo en la calidad de vida de quienes dependen del sistema. Indicaron además que los problemas afectan con mayor fuerza a afiliados con enfermedades crónicas o tratamientos continuos, que requieren una cobertura sostenida.
Desde la Asamblea denunciaron que la conducción del IOSPER “prioriza intereses ajenos al bienestar de los afiliados, verdaderos dueños de la obra social”, y advirtieron que esta situación vulnera derechos esenciales vinculados al acceso a la salud. En ese sentido, remarcaron que la exposición pública del conflicto busca visibilizar los reclamos y exigir medidas que reviertan el deterioro del sistema.
La respuesta oficial
En contraposición, el Gobierno provincial difundió un comunicado en el que afirmó que la OSER avanza, desde diciembre de 2024, en un proceso sostenido de ordenamiento y mejora en la calidad de las prestaciones. “El trabajo se centra en las necesidades reales de los afiliados, garantizando mayor cobertura, accesibilidad y previsibilidad”, señalaron.
Entre los principales avances, la gestión destacó la normalización y el acuerdo de más de 25 convenios prestacionales que se encontraban vencidos, desactualizados o inexistentes. En el área bioquímica, indicaron que durante 2025 se incrementó un 60% la cantidad de prácticas de laboratorio, tras ampliar la cobertura a la totalidad del nomenclador y mejorar los aranceles acordados con el Colegio de Bioquímicos.
También informaron un aumento del 30% en las prácticas quirúrgicas y la regularización de cirugías atrasadas por falta de prótesis. Según el comunicado, actualmente todas las cirugías de urgencia se autorizan a diario y las intervenciones programadas cuentan con fecha asignada, lo que habría permitido recuperar previsibilidad y equidad en el acceso.
Otro punto resaltado fue la reducción del 90% en las solicitudes de reintegros por prestaciones no convenidas, a partir de la regularización de convenios. A esto se sumaron cambios en el sistema de autorizaciones, como esquemas semestrales para medicamentos de alto costo y la digitalización de prácticas ambulatorias, junto con la implementación de la receta electrónica.
Ahorro y uso de recursos
En materia financiera, el Gobierno aseguró que la desvinculación de personal sin contraprestación y la eliminación del antiguo directorio político permitieron ahorrar más de $1.250 millones. Según la gestión, esos recursos se volcaron a las prestaciones de salud, de modo que en 2025 el 87% del presupuesto de la OSER se destinó a cobertura sanitaria, con una proyección del 90% para el próximo año.
Así, la obra social provincial quedó atravesada por un marcado contraste entre los reclamos de los afiliados, que advierten un deterioro en la atención, y la visión oficial, que reivindica un proceso de normalización, mejoras prestacionales y reducción del gasto político.
