
La campaña en la Ciudad, pese al escándalo Espert, sigue su curso. Además del oficialismo y de Fuerza Patria, dos candidatos competitivos a senadores nacionales empezaron a desplegar sus estrategias para superar los dos dígitos y posicionarse de cara a la contienda electoral de 2027. Se trata de la Hormiguita Graciela Ocaña y del neurocientífico Facundo Manes, quienes llegaron a estar cerca de compartir boleta y hoy compiten por la Cámara alta en espacios distintos.
Por su lado, Ocaña viene centrando su accionar en el segmento de adultos mayores, en la salud y en la lucha contra la corrupción. Desde su paso por el PAMI sigue conectada con ese colectivo y continúa recorriendo, muchas veces en silencio y sin cámaras, centros de jubilados.
En ese marco, es habitual que reciba mails o mensajes en sus redes por casos puntuales, en particular trámites ante PAMI de algún vecino. La legisladora cuenta con un equipo que la asiste para resolver esos conflictos de personas mayores de 60 años.
Tal vez por eso, sus recorridas de campaña apuntan a ese segmento. Ahora incorporó a su compañero de fórmula para el Senado, el titular de la UCR porteña, Martín Ocampo, con quien mantiene un vínculo privilegiado.
Uno de los ejes de campaña será el precio de los medicamentos. La Hormiguita planteará que el gobierno nacional bajó el porcentaje de cobertura, en especial de los más caros, y que liberó el precio en las farmacias.
Junto a su mano derecha, el exdiputado Diego García Vilas, realiza recorridas semanales con otros actores vinculados a la salud. En estos días estuvo en la Asociación Médicos Municipales junto a Carlos Rojo, su titular. Se trata del gremio que nuclea a la inmensa mayoría de los médicos que trabajan en los 33 hospitales y en los centros de salud de la Ciudad. Estuvo también con Ocampo, y allí presentó tres proyectos de ley, si le toca llegar al Senado, para mejorar las condiciones sanitarias en el país.
Durante ese encuentro, uno de los más de cien médicos presentes en el auditorio sorprendió a Ocaña: le dijo que la había reconocido en un hospital estatal porteño esperando a ser atendida junto a su marido.
Por su parte, el radical Ocampo continúa la campaña sobre los dos ejes que más conoce: justicia y, sobre todo, seguridad. Entre 2016 y 2018 fue ministro de Seguridad porteño y fue quien se puso al hombro el traumático traspaso de la Policía Federal a la Ciudad. Entre otras propuestas, Ocampo propone en particular un proyecto para crear, a nivel nacional, una policía dedicada exclusivamente a los delitos online: una ciberpolicía.
Todas las actividades proselitistas se complementan con el lema “Hay otra manera”, que también impulsa el candidato a diputado de la lista Martín Lousteau, quien tiene en Emiliano Yacobitti su jefe de campaña del sello Unidos. La UCR juega en esta boleta.
Justamente entre los radicales asoma Manes, quien, a pesar de su filiación política, compite por una banca en el Senado lejos de la UCR. El lema del neurocientífico es “Ni los de antes ni los de ahora”, y su campaña se centra en la ancha avenida del medio que, piensa, tiene un votante desencantado con la lista peronista encabezada por La Cámpora (Mariano Recalde) y con el PRO, luego de abandonar la marca amarilla para pintarse de violeta.
Junto a su hermano Gastón y su jefe de campaña, Eduardo Machiavelli, más el dirigente Bruno Screnci (estos dos últimos excolaboradores de Horacio Rodríguez Larreta), conforman una mesa política que se entusiasma con que el ausentismo que se dio en mayo en las elecciones pueda traducirse en votos para Manes.
Por ello se apelará a su carácter de outsider de la política para intentar movilizar estos grupos de desencantados.
En la campaña concreta, Manes tiene dos actividades en calle por día y realiza, al menos, dos entrevistas periodísticas.
A ello se le suma el intenso trabajo en redes sociales. A diferencia de otros dirigentes, por su trabajo de neurocientífico el diputado goza de un tráfico fuerte orgánico en sus redes. Aunque sigue atendiendo pacientes en Ineco, su rol de candidato lo tiene ocupado.
No tiene previstas fotos con políticos. Ni siquiera con Margarita Stolbizer. A pesar de que lleva como candidato a diputado nacional a Sergio Abrevaya, presidente del GEN nacional, el partido de la diputada.