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"Una opción sería aportar el capital de trabajo necesario para que los tambos vuelvan a entregarle leche a la empresa, un punto que es clave para la reactivación de sus plantas", comentó una fuente de los comerciantes chinos, según informa hoy el diario La Nación.

A cambio, los comerciantes chinos recibirían un porcentaje accionario de la marca láctea. Además del dinero para volver a producir, la asociación le aportaría a Parmalat un seguro canal de comercialización de sus productos.

La iniciativa de los chinos apunta hacia el futuro. Si bien por el momento mantendrían las marcas Parmalat y Gándara, la finalizad de su inversión sería poder comercializar de acá a unos años sus propias marcas.

En este sentido, a partir de junio próximo, los súper de la colectividad lanzarán al mercado entre 15 o 20 productos de primera necesidad propios. Cabe recordar que los autoservicios chinos mueven más de $ 2.000 millones anuales.