E

"Lo ideal sería que llegaran el día antes y se fueran a comer conmigo, como una forma de crear un ambiente más amplio para la conversación, pero creo que va a ser muy difícil", dijo Lagos en declaraciones a Radio W, que reproduce la agencia ANSA.

Kirchner y Vázquez van a coincidir el 11 de marzo en el puerto de Valparaíso, donde participarán en el Parlamento chileno de la asunción de la presidenta Michelle Bachelet.

Lagos calificó de "serio" el diferendo que mantienen ambos países, ya que "en la práctica Uruguay está sin poder salir por vía terrestre, salvo cuando lo hace a través de Brasil, y en consecuencia acá tenemos un problema muy de fondo".

"Lo hemos conversado con otras autoridades, como Enrique Iglesias, titular de la Secretaría General Iberoamericana, y he estado en contacto con el secretario de la Organización de los Estados Americanos", José Miguel Insulza, reveló el mandatario chileno.

Lagos contó además que "ayer vimos algún atisbo, donde el canciller (Jorge) Taiana pensó que podría haber espacios para conversar, pero creo que es muy lamentable porque esto va a hacer que las formas de poder reanudar las conversaciones para fortalecer el Mercosur se van a ver afectadas".

Obras en marcha

La planta de celulosa de la empresa finlandesa Botnia que se construye en la ciudad uruguaya de Fray Bentos comenzaría a funcionar "a fines del 2007" y la fábrica de la compañía española Ence "a fines del 2008".

Así lo estimó esta mañana el vocero de Botnia en Uruguay, Carlos Faroppa, quien enfatizó que "hay mucho camino por recorrer" hasta que se pongan en marcha las papeleras, resistidas fuertemente por los pobladores entrerrianos.

En tanto, el director de Relaciones Públicas de la española Ence, Claudio Vallejo, afirmó que no ven "con buenos ojos" paralizar la construcción de las plantas, aunque indicaron que aún no evaluaron la posibilidad planteada por el presidente Néstor Kirchner.

"Nosotros hemos cumplido con todos los requisitos para instalar estas plantas y es por eso que no vemos con buenos ojos parar su construcción por 90 días, como lo pidió Kirchner ante el Parlamento", dijo.