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El diplomático dijo que entre esos empresarios, entre 13 y 14 en total, estarán los de la principal papelera sueca, Stora Enso, que comparte la sociedad en un 50 por ciento con capitales de Finlandia.

Precisamente, de Finlandia provienen los capitales de la empresa Botnia que se está levantando en la costa del Río Uruguay y que despertó el enérgico rechazo de los vecinos de Gualeguaychú y un severo conflicto diplomático entre Argentina y Uruguay.

Tanto Suecia como Finlandia son líderes mundiales en la industria del papel y la celulosa y están realizando fuertes inversiones en la región.

De hecho, el presidente brasileño Lula da Silva anunció el año pasado una inversión de 1.200 millones de dólares mediante la fusión de Stora Enso y la brasileña Aracruz Celulose.

Uno de los proyectos de este conglomerado empresario es instalar una importante papelera en Sao Borja, sobre el Río Uruguay, frente a la ciudad correntina de Santo Tomé.

Estas empresas están adquiriendo en Brasil cientos de hectáreas de bosques para dedicarlo a la producción de esta fábricas, como así también en el interior de Uruguay, en el departamento de Durazno.

En una entrevista que concedió a la agencia Noticias Argentinas, el embajador sueco aclaró que "ninguna de estas empresas están exportando contaminantes del medio ambiente".

Admitió que hace o 20 o 30 años, estas compañias eran altamente contaminantes y así lo sufrió su propio pueblo natal, Sundsvall, ya que el río que lindaba esa ciudad era "el de mayor polución del mundo".

Pero el embajador aclaró que "mucho se ha trabajando" en estos años para atenuar el impacto ecológico de este tipo de plantas.

El embajador Rodin -quien hasta hace poco cumplia la misma función en Chile- anticipó que dentro de un mes vendrán empresarios del sector del papel y la celulosa para "explorar el terreno para inversiones".

Expresó, además, que como muestra del creciente interés que Suecia tiene sobre la Argentina, será abierta el 7 de marzo una oficina del denominado Consejo del Comercio, que tendrá como fin fomentar las inversiones de empresas suecas en el país.

Rodin consideró que las áreas de inversión pueden ser de la más diversas debido a que Suecia tiene "un alto desarrollo en tecnología".

El diplomático dijo que los empresarios analizarán aquí "la situación del mercado, los posibles negocios y los clientes potenciales".

También expresó la necesidad de una alianza comercial entre el Mercosur y la Unión Europea con el fin de potenciar el crecimiento de ambas regiones.

Recordó que el gobierno socialdemórata de Suecia -acompañado por verdes y un sector del comunismo- fue uno de los mayores impulsores de la integración entre las dos bloques, que ahora se encuentran en punto muerto.

Rodin admitió que la mayoría de los capitales europeos, como los de su país, dirigieron sus inversiones hacia los países de Asia, pero insistió en afirmar que a Suecia le interesa también el Mercosur.

Como muestra del histórico interés por Argentina, Rodin mencionó el fuerte trabajo realizado áquí por empresas suecas, como Volvo, Scania, Ericsson y SKF.