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La convocatoria abarca a instituciones como el Foro Ecologista de Paraná y a comisiones vecinales de esa zona –como Croacia Sur, Bajada Grande, Mosconi Nuevo, Alloati, Puerto Viejo– y de otros puntos de la geografía paranaense. Participará una profesora en Derecho Internacional y especialista en temas relacionados a aguas subterráneas y Acuífero Guaraní, Adriana Pérez, de la Facultad de Ingeniería y Ciencias Hídricas de la Universidad Nacional del Litoral. El titular de la comisión vecinal, Fernando Cavallo, explicó que la intención del encuentro es iniciar un debate sobre un tema tan relevante para la ciudad, por sus implicancias futuras.

En ese sentido, adelantó que “los vecinos están disconformes con el proyecto termal, porque habitan en una zona natural, que se verá sensiblemente modificada” a partir de la iniciativa de la Municipalidad en ese sector. El dirigente barrial mencionó que la preocupación es que la vecinal actualmente constituye el cordón turístico de la ciudad, ligado a la naturaleza. Y la preocupación es el cambio que el plan termal traerá al sector, en relación a las construcciones. Además de este impacto social, existe un análisis en relación a la incidencia en materia ambiental.

En ese sentido, vale mencionar que el Foro Ecologista planteó su oposición al plan termal “y al tratamiento político del gobierno municipal, que no propició el debate en la sociedad”, dijo ayer a UNO el dirigente ecologista Daniel Verzeñassi. “No fuimos convocados como organización no gubernamental o grupo ambientalista para analizar el tema con otros sectores. No puedo saber qué escucharon y qué dijeron los clubes, los colegios de profesionales, las instituciones educativas. Sólo hubo una difusión de un documento con las bellezas paisajísticas y las comodidades para el turismo”, cuestionó.

Para la reunión de hoy, anunció que el Foro Ecologista difundirá un documento que expondrán las razones del rechazo a la propuesta de la Municipalidad. “Se anuncia una perforación entre 900 y 1.400 metros, en un lugar que tiene cuatro veces más sal que en las aguas de mares. Al sacarse, luego tiene que disponerse finalmente; si sacan como en María Grande 50.000 litros hora, están sacando 5.000 kilos de sal que luego se arrojan al río Paraná y rompería definitivamente el ecosistema del borde costero o deben reinyectarse al Acuífero, comprometiendo la fuente más confiable de provisión de agua para el consumo humano”, opinó.

El presidente de la comisión vecinal anunció que la actividad de hoy será la primera de una estrategia destinada a discutir el proyecto con toda la sociedad paranaense.(UNO)