A
l frigorífico Friboi, que compró este año el Swift de la Argentina, lo acusan en Brasil de malas prácticas comerciales. Denuncias de los productores agropecuarios revelaron que la empresa, la cuarta mundial en faena vacuna, comandaría un cártel de precios junto a otros tres establecimientos.Por ese mecanismo, los ganaderos son obligados a vender la hacienda por valores artificialmente inferiores a los que debería tener si funcionara libremente el mercado. En un comunicado, el frigorífico negó ser responsable de la formación de cártel de precios.
Friboi pudo adquirir el frigorífico argentino Swift, por 200 millones de dólares, gracias a un préstamo del Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social de Brasil (BNDES), una institución oficial. La operación en Argentina fue inédita porque por primera vez el banco financió un grupo privado para adquirir empresas fuera de Brasil.
El dueño del frigorífico, Jose Batista Junior, fue pescado en declaraciones comprometedoras, filmadas sin que él lo supiera, en la que reconoció: "Nosotros hacemos los precios, los regulamos. Los otros acompañan", agregó, en referencia a otras tres empresas del sector, Mataboi, Bertin e Independencia, con las cuales el empresario operaría en régimen de cártel.
En esa grabación, el empresario admitió que esta práctica, que distorsiona los mercados, está muy difundida en cinco estados ganaderos de Brasil. Según el propio Bastista, serían Mato Grosso, Goiás, San Pablo, Minas Gerais y Mato Grosso del Sur. Por cierto, mientras que en la Argentina y Uruguay el kilo vivo de ganado ya cotiza en torno a 90 centavos de dólar, en el sur de Brasil no llega a los 70 centavos.
Batista sugirió, durante la grabación secreta, que algunos de los gobiernos de esas provincias permiten usar ese mecanismo a cambio de coimas.
Los contenidos de las cintas de esa escucha secreta fueron difundidos ayer por el diario Folha de Sao Paulo. El caso está siendo investigado por el Consejo Administrativo de Defensa Económica (CADE), organismo oficial brasileño de defensa de la competencia. La causa se inició a partir de una denuncia efectuada por Confederación Nacional de Agricultura del Brasil (CNA). También se sospecha que el estatal BNDES favoreció al propietario de Friboi en detrimento de otro frigorífico con el cuál está en guerra comercial. (Clarín)