E
n el taller de Aquiles Arus, un despachante de aduana y exportador entrerriano, se han restaurado y exportado más de doscientas unidades a Europa. "Nuestra intención es agregar valor a las unidades a través de la restauración", expresó el empresario, que preside la Cámara de Exportadores de Entre Ríos."Los precios de los tractores antiguos han aumentado debido a la exportación, lo que hace un poco más difícil su colocación. Pero en nuestro caso, como hacemos un trabajo completo de restauración, dejando a los tractores prácticamente originales, es posible que un modelo con medio siglo de vida e incontables horas de laboreo luzca impecable."
En realidad la exportación de tractores antiguos no fue una idea gestada en la empresa. "Un contacto de un amigo en Alemania abrió una relación con una empresa de Brasil que exportaba tractores antiguos a Europa y que deseaba exportar desde la Argentina", describió Arus.
A raíz de estas colocaciones, Arus comenzó a recibir pedidos del exterior de tractores restaurados. Por eso, montó un pequeño taller en Paraná y hoy envía los vehículos completamente reacondicionados junto con algunos que se venden en su condición original. Obviamente, el destino de estas unidades son coleccionistas, que en Europa son muchísimos.
"De todos modos, nuestro interés está centrado en la venta a comerciantes, que demandan cantidad y en forma regular. Los principales destinos son Bélgica, Alemania, Holanda e Italia", dijo Arus.
Este es un nicho de mercado muy pequeño; en realidad, la exportación de tractores antiguos, como toda exportación de antigüedades, tiene límites. "Por esta razón restauramos tractores más modernos, de los 60, que es un segmento muy fácil de encontrar en cantidades importantes. Además, se trata de marcas muy conocidas, como Hanomag y Deutz. Creo que es posible continuar por varios años con esta actividad, en función del volumen de demanda que tenemos y la disponibilidad que hay en el mercado."
Hanomag y Deutz, las marcas que exporta Arus, conforman una porción sustancial de la historia en materia de maquinaria agrícola del país. Llegadas a fines de la década del 50, son parte del cuarteto que, junto a Fiat y John Deere, inició el proceso de tecnificación agrícola de posguerra, algunas de ellas con la fabricación de tractores en un programa de promoción. (La Nación)