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“La idea de este trabajo es tener un verdadero diagnóstico y una actualización de lo que es el perfil exportador entrerriano, a la luz de los cambios producidos en el escenario económico nacional”, explicó Gómez.

Agregó que actualmente la dinámica exportadora de Entre Ríos hace que muchas actividades, basadas en la posibilidad de insertar sus productos en el mercado internacional, sean las que traccionan el desarrollo de la economía provincial. En ese sentido mencionó a los sectores avícola, citrícola, arrocero y forestoindustrial, entre otros, los que “han venido resurgiendo a partir del nuevo esquema económico nacional, que permite incentivar las exportaciones y a su vez realizar algún proceso de sustitución de exportaciones”.

Acotó que el trabajo consiste en el relevamiento de 700 empresas, algunas que actualmente exportan y otras que lo harán en el futuro, y que cuenta con el apoyo financiero del CFI y el acompañamiento de la UIER y la Cámara de Comercio Exterior.

La tarea contará con la participación de estudiantes avanzados de la carrera de Comercio Exterior de las Uader, de la UNER y de la Universidad de Concepción del Uruguay, quienes concretarán el trabajo de campo y las encuestas a las empresas.

“El trabajo tiene como objetivo definir cuáles son las fortalezas y debilidades de las empresas, ver cómo podemos mejorar el accionar de los organismos de apoyo, como el Estado, la UIER y la Cámara de Comercio Exterior, y ver cómo muchos sectores que hoy no exportan se pueden sumar integrando la cadena de valor de sectores con fuerte sesgo exportador”, agregó el subsecretario.

“Es indudable que en menos de dos años la realidad productiva de Entre Ríos ha registrado fuertes cambios, se han recuperado muchas industrias, otros sectores se han transformado y comienzan a aparecer muchos emprendimientos y actividades nuevas. En ese contexto, los sectores más dinámicos en la actualidad son los ligados a la exportación, como los productos cárnicos, lácteos, miel, citrus, forestoindustria, arroceros, químicos-farmacéuticos, papel y cartón, entre otros, y este relevamiento nos permitirá estudiar la posibilidad de que otros sectores participen también de ese crecimiento, sustituyendo importaciones y desarrollando nuevos proveedores, entre otras alternativas”, completó Gómez.

Por su parte, Héctor Motta comentó que hasta ahora la provincia de Entre Ríos estaba “en una mora muy profunda” en cuanto al sistema de industrialización de bienes primarios que se producen acá y en la interpretación de lo que se puede llegar a producir.

“Pero ahora estamos tratando de hacer sonar las campanas para que los emprendedores encuentren un lugar de acción en nuestra provincia. Este estudio que estamos lanzando tiene por finalidad que recorramos todas las cadenas de valor que posee la provincia, analizar en cada una de ellas donde se puede profundizar y crear los focos de desarrollo para que los emprendedores encuentren el cauce de acción”, comentó Motta, tras lo cual indicó que además se posee el aval de la Unión Industrial Argentina, “lo que es muy importante”.

A su turno, el coordinador de esta iniciativa, Miguel Nardea, destacó que el trabajo “brindará la posibilidad de relevar e integrar las distintas cadenas de valor y lograr que los pequeños emprendedores industriales posibiliten la sustitución de importaciones y la integración a todo el contexto industrial”.

Explicó que para ejecutar el trabajo se dividió a la provincia en sus 17 departamentos y en dos zonas, costa del Paraná y del Uruguay, con cabeceras de coordinación en las ciudades de Paraná y Gualeguaychú, respectivamente. A partir de allí, con una base de datos y un esquema de la Cámara de Comercio Exterior, la UIER, la Aduana y el aporte de las municipalidades, se tratará de realizar una radiografía de todos los sectores productivos.