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hiano había apelado ante la Justicia la decisión de las autoridades partidarias que, a su turno, le rechazaron la impugnación a la lista Radicalismo para el Cambio que encabeza Sergio Varisco.
A los fines del proceso electoral que protagoniza la UCR, vale consignar que la noticia es que el juez resuelve no hacer lugar al planteo del Frente Radical. Terminaría así el planteo del Frente Radical que ya acudió, sin suerte, ante el Comité provincial y ante el Tribunal Electoral y de Disciplina, reclamando la no oficialización de la lista de Radicalismo para el Cambio por haber sido presentada fuera de término.
Sin embargo, del fallo de Ríos surge una interpretación curiosa de los pasos que hasta aquí han dado las autoridades partidarias de cara a las elecciones del 7 de noviembre. A grandes rasgos, para el juez, hasta el momento, el Comité provincial no ha oficializado ninguna de las listas, incluyendo la del propio Ghiano.
En efecto, en los considerandos del fallo, Ríos consigna que correspondería a la justicia determinar “si lo dispuesto por el Comité o por lo que éste denomina Mesa de Oficialización, constituye precisamente este acto formal de dar por apta para competir a una línea interna, a través de la aprobación de sus listas”.
Considera que esto es así porque “el acta labrada a la hora de cierre de presentación de listas se encuentra suscripta por el secretario (Miguel Rettore); el apoderado (Alejandro Carbó); y demás autoridades partidarias y apoderados de listas”.
“Ninguna formalidad de este documento nos da la pauta de que se trate de una reunión del Comité provincial de la UCR oficializando listas, única autoridad competente dispuesta por Carta Orgánica”, enfatiza Ríos en el fallo.
Es así que, como a su entender el Comité no ha resuelto aún la oficialización, debe darse este primer paso para que, luego, el Frente Radical pueda realizar alguna presentación y acudir al Tribunal Electoral y de Disciplina. Recién después correspondería que la justicia entienda en el caso.
Por eso, Ríos considera que quienes acudieron a su juzgado pretenden la nulidad “sobre una circunstancia que no se encuentra resuelta” por lo que explica que “debe abstenerse el juez de resolver una cuestión abstracta que deviene de la falta de agotamiento de la instancia partidaria”. Agrega, contundente, que “no puede anularse un acto inexistente”. Fuente: El Diario
