E
l diagnóstico del Ejecutivo es que en más de la mitad de los 1.800 edificios escolares existentes existe, en promedio, un déficit de al menos un aula. También, las previsiones indican que en Entre Ríos se requiere hoy la construcción de aproximadamente 54 nuevas escuelas; en parte, esa necesidad será suplida en los próximos dos años con una inversión nacional de 18 millones para la construcción de 34 nuevos establecimientos educativos. Pero harían falta todavía 20 más, y su construcción debería iniciarse en 2005 por cuanto es prioritaria su ejecución.Mientras ello no ocurra, una parte de los 340 mil alumnos que conforman el sistema educativo provincial seguirá dando clases en condiciones deficitarias. “Hay 1.800 edificios escolares en toda la provincia. Y estamos hablando de que la mitad, o poco más de la mitad, necesita un aula. Eso en promedio, porque hay lugares en los que se necesitan siete aulas. Pero también en algunos lugares habrá que pensar en construir nuevas escuelas, aparte de las 34 que construirá la Nación entre este año y 2005. Yo calculo que estarán haciendo falta unas 20 escuelas nuevas atento a la obsolescencia de algunos edificios. En Paraná hay 3 ó 4 escuelas que funcionan una encima de la otra, como la Magnasco o la Záccaro”, dice Juan José Moreno, secretario de Obras Públicas.
El dato sobre el déficit de aulas en las escuelas, asegura el funcionario, apareció conforme se avanzó en el plan de reconstrucción de los 792 edificios escolares que se comprometió a encarar el Gobierno, y cuya conclusión ya ha sufrido dos aplazamientos.
Primero se pensó terminarlo para marzo, antes del inicio del ciclo lectivo 2004; luego, se pospuso su finalización para mayo; y ahora la promesa es que los trabajos estarán listos recién en el segundo semestre, probablemente hacia fines del mes de julio.
Aunque un informe que elaboró la Dirección de Arquitectura de Entre Ríos y que fue puesto en manos de la conducción de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer), indica que sobre 792 edificios incluidos en el programa de reconstrucción, a mayo se habían podido concluir los trabajos en solamente 446, con un nivel de avance del 56,3 %.
Moreno, sin embargo, dice que esa evaluación corresponde a mayo último, y que ahora el nivel de avance alcanza el 70 %. De todos modos, sostiene que conforme se fueron licitando los trabajos, aparecieron nuevos requerimientos y, así, ahora el plan de 792 escuelas sumó otras más, y el número es de 1.200 establecimientos. “Alrededor de 520 escuelas ya están terminadas”, explica el funcionario.
En esas tareas, la provincia comprometió una inversión total de 20 millones de pesos, pero, puntualiza el secretario de Obras Públicas, se trata sólo de reparaciones ante la emergencia, no de obras complementarias ni edificaciones nuevas.
“Lo que estamos haciendo son reparaciones que condicionaban la habitabilidad, incluso en algunos casos la seguridad de los alumnos, como son el abastecimiento del agua potable, el uso de los baños o la estabilidad de los techos. Pero este proceso debe seguir. Ya tenemos una demanda de 1.000 aulas nuevas, que hay que construir para atender el crecimiento vegetativo y el aumento de la matrícula de las escuelas, y eso va a demandar alrededor de 30 millones de pesos. Lo que podamos empezar este año, lo vamos a empezar, y lo demás se continuará el año que viene, pero va a haber que prever inversiones fuertes en el sector para poner definitivamente al día la infraestructura”, argumenta.
La pregunta es de dónde saldría el dinero para cubrir ese déficit de 1.000 aulas en la provincia. Moreno cree que habría que repetir durante los próximos dos años la misma inversión que este año se destinó a la reparación de casi 800 establecimientos. Quince millones en 2005 y una cifra similar en 2006 pondrían a punto la infraestructura educativa. “Aunque es prioritario hacerlo en el corto plazo de forma de poder estar más o menos al día con la infraestructura”, concluye.
Fuente: El Diario