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uego de poco más de un año de gestión, la relación del presidente Javier Milei con el campo es buena y respetuosa, al menos eso es lo que aseguró el presidente de la Sociedad Rural Argentina, Nicolás Pino hace un tiempo.

Sin embargo, esto no quiere decir que el sector rural esté del todo conforme con las medidas que toma el mandatario nacional, y de hecho, en los últimos días se han acrecentado las quejas en relación con las retenciones, ya que piden su eliminación.

Hace menos de una semana, la Federación Agraria (FAA) de Entre Ríos dio a conocer un comunicado en el que exige la total eliminación de las retenciones, las cuales, remarcaron, representan el 2,9% del ingreso total en la estructura impositiva de nuestro país, según los datos difundidos por el Ministerio de Economía.

Ante esta realidad, la entidad cuestiona: “¿Por qué siendo un ingreso de bajísimo impacto en las arcas del Ministerio de Economía, sea uno de los causales del quebranto de cientos de miles de productores y por consiguiente no sean eliminados?”.

"Nadie quiere volver a décadas pasadas nefastas, en donde cerca de 100.000 productores dejaron de labrar la tierra”, concluyeron.

Tras el documento que dio a conocer la FAA, quien se sumó al reclamo fue el diputado provincial y ex secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, durante la presidencia de Alberto Fernández, Juan José Bahillo.

El ahora legislador opinó en recientes declaraciones que a las retenciones habría que empezar a desandarlas, agregando que durante el gobierno anterior no se hizo porque aun los productores tenían rentabilidad.

“Ahora, con o sin sequía no tienen rentabilidad. Esto es un sinsentido total y absoluto cobrarle retenciones a alguien que en la ecuación primaria no gana plata. Está más invirtiendo para lograr el cultivo que el ingreso que le genera ese cultivo. No se puede gravar con retención a una actividad que no tiene una ganancia inicial. Los productores se están fundiendo trabajando”, aseguró el integrante de la Cámara Baja entrerriana.

Juan José Bahillo.

A pesar de respaldar el reclamo de los productores, las palabras del dirigente peronista no fueron tomadas de la mejor manera por algunas organizaciones que representan al sector, como la Federación de Asociaciones Rurales de Entre Ríos (Farer), que criticó fuertemente al ex funcionario albertista mediante un escrito titulado “El silencio es salud”.

En el mismo, los dirigentes de la Farer reconocen: “Sin duda alguna ese pedido va en consonancia con el viejo reclamo de las entidades agropecuarias, ya que dichas retenciones solo conllevan atraso, retracción de la economía, disminución del empleo y la inversión, lo que equivale a un cóctel ideal para el estancamiento y la marginalidad”.

Aunque, cuestionan: “Pero lo que en este caso resulta insólito es que la solicitud venga de boca de un funcionario del pasado kirchnerista que no hizo absolutamente nada para que ello ocurriera durante su mandato”.

“Tal vez Bahillo se haya olvidado del pedido recurrente de reglas claras y previsibilidad; la disminución de la presión tributaria y, precisamente, la eliminación de los DEX que su gobierno nunca atendió. Tampoco es cierto -y no podemos dejarlo pasar-, cuando dice que durante su gestión la rentabilidad del productor fue buena, hecho que supuestamente justificaba la permanencia de las retenciones. Esta afirmación es un claro ejemplo del relato deformante que cubrió con su manto todos los gobiernos kirchneristas”, agrega el documento.

Y finaliza: “Por todo lo expuesto, sería prudente que el ex secretario K no tergiverse la realidad ni quiera llevar agua para su molino, justamente en un momento donde los ánimos de los productores están por el piso ante una nueva sequía que pone en jaque su supervivencia productiva. Ante este panorama, el silencio es salud".

Francisco Morchio.

Quien se sumó a este fuego cruzado fue el diputado nacional del PRO, Francisco Morchio, respaldando la postura de la entidad rural y con palos para el legislador del PJ: “Es lógica la reacción de Farer. Bahillo fue parte de un movimiento político que tenía a las retenciones como bandera. Y aunque Bahillo no hubiera estado de acuerdo, todos ellos saltaban y bailaban en torno a esa consigna”.

Más adelante, recordó que la Ley Bases original impulsada por el presidente Javier Milei disponía un aumento de las retenciones, y se jactó de haber trabajado conjuntamente con el gobernador de Entre Ríos, Rogelio Frigerio para bajar esos porcentajes.

“Aquello pasó un poco desapercibido porque se puso el acento en otro punto de la ley original que era una retención arbitraria del 15 por ciento para todas las economías regionales. Pero el aumento para el girasol, el trigo, el maíz, la soja y la carne también estaban contempladas”, reveló.

De acuerdo a lo que apuntó Morchio, para el trigo y el maíz, se pasaba de una alícuota de 12% a una de 15%; para el girasol subía de 7% a 15%; en el caso de la soja, se mantenía en 33%, pero la harina y el aceite pasaban de 31% a 33%. La carne vacuna que tributaba un 9% querían llevarla al 15%.

En este marco, repasó: “En aquel momento tuve varias conversaciones con Frigerio para que interceda ante el Gobierno nacional. Él advirtió que estábamos dando la pelea un poco solos. Insistimos y afortunadamente después, un poco movilizados por él, los otros gobernadores lograron hacer ver el error que suponía esto y se terminaron sacando estas cláusulas del proyecto de ley”.

Voces del sector

Por su parte, dirigentes distintas agrupaciones dejaron su opinión y brindaron un panorama de la realidad que atraviesa el sector, tal es el caso del presidente de la Bolsa de Cereales de Entre Ríos, Héctor Bolzán, quien reclamó “retenciones cero”.

En declaraciones a Radio Plaza 94.7, puso como ejemplo al grupo Los Grobo Agropecuaria S.A., firma que no pudo alcanzar un acuerdo con sus acreedores para extender los plazos de pago de sus deudas, acumulando un total de US$12 millones y $5,01 millones en obligaciones vencidas.

Héctor Bolzán.

"La preocupación en el sector es grande porque no venimos de años buenos, el productor viene muy jugado no solo con el tema climático y de la seca que ha dado problemas graves lo que hace que el productor no esté económicamente bien, y con una perspectiva de una Niña que está instalada, sino que también hay un tema de rentabilidad del sector que joroba mucho”, expresó Bolzán.

Y en relación con los motivos de esa baja de rentabilidad, detalló: “Los costos no se han elevado tanto, lo que bajó mucho internacionalmente es el precio de los granos, por las grandes cosechas que hubo en otras partes del mundo elevando los stocks. Al bajar tan drásticamente, en más de 100 dólares, más las retenciones que nos están asfixiando, produce una situación bien angustiante y lo que está pasando el productor no es nada agradable”.

Seguidamente, contó: "Todas las instituciones que representan al campo están dialogando, pidiendo, charlando y se escucha por todos lados el clamor y la necesidad de que revean lo que está pasando en el sector y el tema de retenciones”.

Y enfatizó: “A lo que hemos llegado en los precios internacionales de los cereales, hoy para amortiguar lo que está pasando habría que bajar las retenciones por completo y dejar retención cero, porque bajar un 5 o un 10% no mueve la aguja en los precios ni en la rentabilidad que tiene que tener el sector”.

José Colombatto.

En esta misma línea, se pronunció el vicepresidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), José Colombatto, quien aseveró: "Venimos con un quebrante importante donde los precios internacionales no están acompañando y muchos productores dicen que en marzo cuando levanten la trilla se van a encontrar con deudas que se les va a complicar pagar".

Y para dejar bien en claro tanto su postura como la de la entidad que representa, manifestó: "Los productores no pedimos que nos subsidie, sino que entienda que hoy las retenciones realmente nos están complicando más que nunca. Desde nuestra entidad, nuestra bandera es eliminarlas . Somos conscientes de que la situación en la Argentina no es de la mejor hace muchos años, pero creo que las retenciones nunca tendrían que haber existido Es el impuesto más distorsivo que hay en la producción agropecuaria".