La ex esposa de Alberto Fernández brindó una extensa entrevista donde reveló detalles de su intimidad durante los días de encierro en la Quinta de Olivos. Las peleas, su cumpleaños, las infidelidades y los pedidos de ayuda sin respuesta.
F
abiola Yañez se desplazó hacia el corazón de Madrid
cuidando con celo el anonimato para su entrevista con Infobae, sabedora de la
repercusión de su recién conocida denuncia contra Alberto Fernández por
violencia de género. El encuentro tuvo lugar en la Gran Vía, en un salón del
hotel Emperador. Vestida de blanco, la ex primera dama bebió un generoso trago
de agua antes de comenzar a hablar. Apenas se conocía su voz, y fue ya desde
las primeras palabras que pronunció, cuando se quebró. Teme por su hijo: ”Jamás
hubiera querido exponerlo”, lamentó, en referencia a las fotografías que han
trascendido con su rostro golpeado. El temor continúa en el presente, en su
casa en la capital española: “Yo hoy no podía salir. Pusieron inhibidores que
hacían que el auto se apagara”. No sabe quién es el responsable de estas
intimidaciones, pero desea que la justicia se encargue de investigar.
A lo largo de la charla, la ex pareja de Alberto Fernández detalla las violencias que sufrió, las infidelidades, la indiferencia del entorno y hasta las acusaciones de que fue víctima, además de desmetir rumores sobre su vida en Madrid y replicar las versiones acerca de la paternidad de su hijo.
“Mi familia está sufriendo, separada; separada porque mi mamá está conmigo”. Reveló Yañez que su madre es la única persona que la está “sosteniendo” en España, que no tiene “empleados ni niñera”, como dijo haber leído en medios. “Solas otra vez, y en Olivos también estuve sola. Siempre estuve sola”, afirmó. Y no puede trabajar, aseguró, mientras tiene que soportar rumores de que pasea por las calles más exclusivas de Madrid. “Viví una situación muy horrible cuando él -Alberto Fernández- dijo que mi mamá y mi hermanita eran... no voy a decir la palabra que utilizó. Dijo que él estaba manteniéndolas”, relató, angustiada sobre el impacto de esa frase sobre sus seres queridos.
Las fuertes imagenes de Fabiola Yañez.
Confesó que el disparador de la denuncia contra Alberto
Fernández fue el “acoso telefónico, terrorismo psicológico”. “Estuvo durante
dos meses amenazándome día por medio con que si yo hacía esto, si hacía lo
otro, se iba a suicidar”, detalló. En medio de esas traumáticas vivencias, su
hipertensión se descontroló, al punto de sufrir picos de presión que la llevaron
a terminar internada en España.
Estas sólo son las primeras confesiones de una mujer a la
que “la gente no conoció” y “a la que nunca nadie defendió”, se quejó. En la
Quinta de Olivos era el trabajo social, su tarea como primera dama, lo que la
“mantenía en pie, y lo hacía con todo el amor del mundo”. En lo demás, nadie le
dio su ayuda, tampoco el Ministerio de la Mujer, tampoco los políticos del
entorno íntimo, que sabían lo que pasaba, subrayó. Hoy, en el Emperador con
Infobae, y aunque nerviosa por lo vivido y la dureza de rememorarlo, proclamó:
“Yo necesito estar íntegra para mi hijo y durante mucho tiempo en Olivos no lo
estuve. Pero hoy me siento más fuerte que nunca.” Y al mismo tiempo dijo: “Yo
he cuidado a este hombre de tantas cosas. Esos videos que aparecieron el otro
día son poca cosa al lado de lo que hizo”.