Todo el arco opositor ha hecho hincapié en que el electo diputado quiere ser candidato pero no vive en la provincia y no es entrerriano. El movimiento de izquierda es aliado al Frente de Todos.
E
l Partido Comunista (PC), que forma parte del Frente de Todos, lanzó un comunicado donde marca los desafíos para el 2022, y señala al diputado nacional electo de JxER, Rogelio Frigerio, como parte del establishment "que ni siquiera vive en Entre Ríos". De este modo, el movimiento de izquierda se suma a quienes le reprochan al exministro del macrismo, además, que no es nacido en la provincia.
Conmemorando los 38 años de la democracia y en recuerdo a las dos décadas pasadas desde las jornadas de diciembre de 2001, el Partido Comunista de Entre Ríos dio conocer un fuerte comunicado.
El texto del movimiento que pertenece al Frente de Todos marca los objetivos políticos del espacio de cara al 2022, a la vez que critica a la oposición, puntalmente, dispara contra Rogelio Firgerio.
La principal meta que plantea el PC en materia de construcción política, es recuperar la calle, y a la vez, señala que en la actualidad existen presos y presas políticas en nuestro país, contexto en el cual, sostienen que no hay democracia posible.
Posteriormente, se hace referencia a las últimas elecciones legislativas, que dieron ganador a Juntos por el Cambio, y cuestionan al diputado que encabezó la Lista 502.
Sobre el resultado de los comicios expresaron: “Lejos de
constituirse en una victoria y avance, son un retroceso y consolidación del
conservadurismo en el país y en nuestra provincia con la victoria del
representante del establishment (que ni siquiera vive en Entre Ríos) Rogelio
Frigerio”.
El texto completo
Días atrás se cumplieron 38 años de democracia ininterrumpida en nuestra patria. 38 años que incluyen muchas victorias populares y luchas como también algunas derrotas. Además en estos días se cumplen 20 años de las históricas jornadas del 19 y 20 de diciembre de 2001.
Ambos aniversarios
condensan mucho del sentir de nuestro pueblo y todo este recorrido, que hemos
hecho como sociedad en general y como campo nacional, popular y
antiimperialista en particular, nos marcan el horizonte hacia dónde queremos
ir, nos marca qué democracia necesitamos y queremos, y también a lo que no
queremos volver.
En ese sentido creemos que uno de los desafíos para el campo
popular en el 2022 es volver a ganar las calles y construir los espacios
políticos necesarios para revertir los resultados obtenidos en las últimas
elecciones, que lejos de constituirse en una victoria y avance, son un
retroceso y consolidación del conservadurismo en el país y en nuestra provincia
con la victoria del representante del establishment (que ni siquiera vive en
Entre Ríos) Rogelio Frigerio.
La historia nos marca que suele ser una salida de las sociedades postpandémicas la configuración y abroquelamiento del bloque de poder conservador por un lado y por el otro la disgregación de los sectores populares y si analizamos nuestra situación como país y región venimos de años de pandemia; por un lado la de covid-19 y por otro lado la de los gobiernos neoliberales que promueven el individualismo y la meritocracia.
De la primera recién están comenzando a cristalizarse las consecuencias en lo económico, en lo político y también en la trama social, en las relaciones de producción y en las subjetividades.
De la segunda tenemos un gran acervo de experiencias de lucha y estrategias populares para hacer frente a los ajustes, a la represión, a la expoliación y al recorte de los derechos más fundamentales como la vivienda y un plato de comida.
Justamente haciendo frente a estas pandemias
siempre estuvimos los movimientos sociales y las organizaciones políticas del
campo popular parando la olla y tejiendo redes de solidaridad. Por eso esta
etapa será un desafío más a afrontar con la alegría de la militancia, el
compromiso y solidaridad que nos caracteriza, llevando los debates y
construyendo los bloques de poder necesarios hacia el interior de los espacios
donde militamos para constituir definitivamente al Frente de Todes en el frente
político que necesita nuestro pueblo.
A días de conmemorarse un nuevo aniversario del 19 y 20 de
diciembre 2001 esta democracia incompleta mantiene una deuda con aquellas
luchas y sus mártires; con Pocho, con Eloísa, con Romina, con José…Las
organizaciones sindicales aún tienen el desafío de construir unidad y agenda de
propuestas que sinteticen las necesidades de la clase, y los partidos políticos
deben dejar de jugar internas de entrecasa para proponer un real programa de transformación
que honre la memoria de las luchas y resuelva los problemas de nuestro pueblo.
Cuando hay miles de personas por debajo de la línea de la pobreza e indigencia no podemos mirar hacia otro lado, no podemos seguir sujetos a candidaturas mezquinas o definiciones políticas tibias que terminan por ser quebradas por la derecha y el poder real de Argentina; como pasó en la batalla por la expropiación de Vicentín donde perdimos una gran posibilidad para efectivamente controlar los precios de la canasta básica, nada más y nada menos que la comida de nuestro pueblo.
El acuerdo con el FMI sin revisar la deuda adquirida por el gobierno de Mauricio Macri y Rogelio Frigerio es hambre para el pueblo, es ajuste y represión.
O la cuestión sobre la Hidrovía Paraná,
que es la mayor vía de comunicación fluvial para la exportación y el traslado
de granos de nuestro país. Estas batallas que se perdieron o relegaron son las
que muestran los límites del gobierno de Fernandez y laceran nuestra soberanía.
Tampoco podemos mirar para otro lado cuando el Gobierno quiere firmar un acuerdo con el FMI. Ya hemos vivido esto, y que preocupante que volvamos a decir NO al FMI en diciembre, a días de cumplirse 20 años del estallido de 2001.
El acuerdo con el FMI sin revisar la deuda adquirida por el
gobierno de Mauricio Macri y Rogelio Frigerio es hambre para el pueblo, es
ajuste y represión.
No seremos indiferentes cuando aún existen presos y presas
políticas en nuestro país. No hay democracia posible con presos y presas
políticas, por eso seguimos alzando nuestra voz y puño para decir Libertad a
Milagro Sala y a todes les preses políticos.
Nuestro compromiso como comunistas es con el pueblo, es con la construcción de una patria profundamente anticapitalista, feminista y ambientalista. Urge que construyamos una patria donde quepamos todes con justicia social y económica. No es una utopía, tiene que ser nuestra bandera como pueblo porque merecemos la felicidad, merecemos una vida digna, merecemos una patria libre y soberana.