Con 66 votos a favor, el Senado aprobó las modificaciones del piso a partir del cual los asalariados y jubilados empiezan a pagar Ganancias y los cambios al régimen del Monotributo.
C
on 66 a favor,
una abstención y cuatro ausentes, la Cámara Alta aprobó de manera conjunta las
leyes que modifican el piso a partir del cual los asalariados y jubilados
empiezan a pagar el impuesto a las Ganancias y las modificaciones al régimen de
Monotributo.
En el caso de la primera de las normas, que ahora habrá que esperar a que sea publicada en el Boletín Oficial, la ley que exime del pago de ganancias a trabajadores y jubilados con ingresos de hasta 150.000 pesos brutos y hasta ocho jubilaciones mínimas para los jubilados y pensionados que fue presentado por el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa y aprobada en la sesión realizada durante un fin de semana en la Cámara baja.
La norma contó
con el apoyo de Juntos por el Cambio que, de todos modos, reclama algunas
modificaciones y también discute algunos de los aspectos técnicos porque la ley
sólo modifica el piso y no el resto de las escalas. Pero, a pesar de esta
discusión, al igual que lo que sucedió en la Cámara de Diputados, la iniciativa
fue aprobada por amplia mayoría.
Modificaciones del monotributo
Una vez aprobada,
llegó el turno de otro proyecto de ley que cuenta con media sanción y que fue
enviado por la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) que modifica
el paso del régimen simplificado o monotributo al de responsable inscripto.
El proyecto de
ley que ingresó en enero al Congreso se viene a sumar a las mejoras en la
escala de Ganancias y apunta a un sector de la clase media ya que propone dos
herramientas. La primera, para los que luego de la suspensión de la exclusión
que comenzó en octubre de 2019, y que aún se mantiene, deberán afrontar una
deuda devengada muy importante. La segunda, para el largo plazo, es un nuevo
régimen que haga que el pasaje de monotributista a autónomo sea más simple y
menos costoso.
En el primero de
los casos el proyecto de ley establece que a aquel monotributista que se haya
pasado hasta un 25% de la facturación se le va a ofrecer la oportunidad de
volver a la categoría del monotributo. En el caso de que el exceso de ese 25%
sea anterior al 31 de diciembre de 2020, va a poder computar 50% del crédito
fiscal presunto. Si así fuese, para un monotributista que se pasó en un 40% la
ecuación quedaría con que sin esta norma deberá afrontar una deuda de 1.360.000
pesos pero que, de aprobarse, deberá enfrentar un pago de 649.882 pesos.
Debate por gestiones pasadas
La discusión entre la oposición y el oficialismo estuvo centrada mucho más en lo que hicieron los gobiernos de Cambiemos y de Cristina Kirchner respecto del impuesto. Mientras que el oficialismo señaló la promesa de campaña de Mauricio Macri respecto de Ganancias, la oposición por otro lado hizo referencia que en el kirchnerismo fue la época en donde menos se modificó el piso.
Sólo hubo un cruce cuando tomó la palabra la senadora Elías de Pérez que tuvo en encendido discurso apuntando con el dedo a la cámara -estaba de manera remota- e hizo referencia a una de las frases más conocidas del macrismo que acuñó el ex jefe de gabinete, Marcos Peña, con un “háganse cargo”, lo que significó que una senadora del oficialismo abrió su micrófono y le dijo “el dedito”.
Por su parte, el
senador Martín Lousteau de Juntos por el Cambio señaló que esta norma “es un
alivio pero para un sector muy chico de la Argentina, es un alivio para el 5%
de los trabajadores que están dentro del 10% de los que más ganan”.
Luego de hacer
referencia a la “violencia” de algunos discursos en referencia a los dichos de
Alberto Fernández que llamó “imbécil” a dirigentes de la oposición, el
dirigente radical dijo que era “una pena que debatamos las cosas a las apuradas
y en un contexto de agresividad y tenemos que dejar de vestir de épica algunos
parches a problemas estructurales de la economía argentina como la inflación
que eso hace que el impuesto a las ganancias se comporte de una manera
totalmente anormal”.
“Estamos aprobando
algo que no debería tener una gran épica, que tiene errores, que va a generar
alivios a algunos, costos a otros y que seguramente más adelante vamos a tener
que corregirlo como corregimos otras cosas”, señaló.
De todas formas,
y a pesar de algunos discursos encendidos, hubo apoyo generalizado de todas las
bancas.
Fuente: Infobae