La medida tomada por el Gobierno nacional generó malestar entre dirigentes y productores agropecuarios, quienes se declararon en 'estado de alerta' y definirán en asambleas qué tipo de reclamos realizarán.
E
n el final de
2020, el Gobierno nacional decidió el cierre de exportaciones de maíz, lo que
generó que entidades del campo se declararan en estado de alerta mientras
evaluarán, en asambleas, qué medidas llevar adelante para reclamar. Además,
temen que se intervenga en el trigo y la carne.
"Volvieron a
defraudar al campo y a todo el interior con una decisión que vuelve a generar
una nueva transferencia de recursos de la producción primaria a otros eslabones
de la cadena", aseguraron las cuatro entidades de la Mesa de Enlace: Sociedad
Rural Argentina (SRA), Federación Agraria Argentina (FAA), Confederaciones
Rurales Argentinas (CRA) y la Confederación Intercooperativa Agropecuaria
Limitada (Coninagro).
"Concluye un año difícil y el Gobierno lo complica aún más con medidas inconsultas que van a contramano de todo lo esperable, de lo que creemos que debe hacerse y del sentido común", apuntó la Mesa de Enlace en comunicado emitido el miércoles.
Para la Mesa de Enlace, que tiene al entrerriano Jorge Chemes como titular de CRA, con el cierre de exportaciones "el productor interpreta que sigue funcionando la discrecionalidad y la arbitrariedad, en lugar del diálogo. No se entiende por qué esperan resultados diferentes aplicando las mismas recetas".
El tambero entrerriano, Jorge Chemes, también fue presidente de la Sociedad Rural de Nogoyá.
El campo evalúa
medidas a tomar luego de que el Banco Nación excluyera a productores de soja y
maíz de su principal línea de créditos, cerrara las exportaciones del segundo
cultivo en importancia para el sector.
La decisión comunicada por el Ministerio de Agricultura causó tanta preocupación que los productores agrupados en CARBAP decidieron declararse en estado de alerta y movilización. En las próximas semanas habrá asambleas para definir los pasos a seguir.
Durante el presente
año 2020, según datos del INDEC, el Estado nacional recaudó alrededor de 800
millones de dólares en concepto de retenciones al maíz sobre una cosecha
2019/20 que marcó un récord histórico con cerca de 50 millones de toneladas.
Las Bolsas de Cereales y de Comercio de todo el país también manifestaron su incertidumbre por la medida oficial. "Las restricciones a las exportaciones son una política distorsiva que impiden el normal funcionamiento de los mercados", dijeron.
"Este tipo de
medidas dañan los incentivos para producir e invertir a lo largo de toda la
cadena de valor", señalaron las Bolsas. "Trabar las exportaciones va
en sentido opuesto a la necesidad de una economía en crisis que precisa
divisas", añadieron las entidades.
Por el cierre de
exportaciones, según cálculos privados, la Argentina perderá unos 810 millones
de dólares en envíos al exterior. "Se afecta la credibilidad del país como
proveedor confiable en el mercado generando dudas entre los clientes",
afirmaron.
En tanto, el
diputado Alejandro "Topo" Rodríguez advirtió que la medida puede ser
la antesala del cierre de exportaciones de carne y trigo, y sostuvo que "es
una pésima decisión que desalienta y perjudica a pequeños y medianos
productores de todo el país", según publica el portal lapolíticaonline.com.