Después de haber sido noticia nacional por opinar del dólar, el influencer entrerriano se tuvo que ir de la ciudad luego de ingresar sin permiso. Estuvo en un bar. El dueño del local y el intendente hablaron de lo sucedido.
E
l youtuber, ahora también llamado influencer, Julián Serrano, quien pasa estos días de pandemia en Paraná, su ciudad natal, salió a pasear el fin de semana y no pasó desapercibido.
Serrano decidió quedarse en Paraná, aprovechando para estar cerca de su familia, teniendo en cuenta que por trabajo pasa el mayor tiempo de su vida en Buenos Aires.
El fin de semana salió a pasear con una joven, que sería su novia, y dos personas más a Cerrito. A raíz del COVID-19, el municipio decidió no dejar ingresar a personas de otras ciudades y aquí comenzó el conflicto apenas lo vieron cenando en un bar.
José Palacios, intendente de Cerrito, decidió organizar una conferencia de prensa para exponer los pasos que había dado. Allí buscó llevar calma comentando que se encargó enseguida del tema abriendo una investigación sobre lo que había ocurrido.
“Me puse en contacto con el subjefe de la comisaría a cargo en ese momento y solicité que se realice el procedimiento para que esas personas se retiren del lugar en el que estaban, que no correspondía”, dijo el funcionario.
Luego de esto, siguieron las repercusiones. Según dijeron algunos vecinos, las jóvenes no fueron a trabajar, sino que serían las hermanas del dueño: “Dijeron que vinieron a trabajar y estuvieron toda la noche comiendo, las chicas son las hermanas del dueño”, “gracias a Dios fueron denunciados y fueron retirados del pueblo, pero de todas maneras, ya habían estado en contacto con un montón de personas. Gracias por su irresponsabilidad”, fueron algunos de los tantos mensajes luego de lo ocurrido.
Lejos de llevar calma, Serrano, luego de que lo subieran al auto en el que se trasladaba con el resto de los ocupantes, ensayó una especie de burla. Ya camino a Paraná, en la ruta, usó sus redes sociales para hacer una recomendación poco atinada: “Muy rico, gente. Si son de Cerrito pidan el sanguche de vacío”.