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a nueva etapa de Cambiemos sin el poder nacional empieza a mostrar las diferencias con la anterior y en Entre Ríos se vio estos días un claro ejemplo. El ex ministro del Interior y mandamás absoluto de la alianza UCR-PRO en Entre Ríos entre 2015 y 2019, Rogelio Frigerio, quiso recuperar la iniciativa y congregar, como hizo muchas veces durante aquellos, a toda la dirigencia provincial.

Iba a ser este viernes en Gualeguay, en una cumbre que organizó el ex funcionario y a la que invitó a los intendentes radicales y macristas, los legisladores provinciales y los nacionales. De concretarse, iba a ser el primer encuentro provincial de Cambiemos después de las elecciones  nacionales de la derrota de Mauricio Macri ante Alberto Fernández.

Sin embargo, el radicalismo decidió cobrarse los desaires del ex ministro de los años de poder y le hizo el vacío a la convocatoria de Frigerio. La UCR se subordinó a Frigerio toda vez que hubo que armar listas y tomar decisiones políticas importantes desde 2015. Las negociaciones estaban condicionadas por la abultada billetera de obra pública que administraba el entonces funcionario, vitales para las gestiones municipales de los casi 30 intendentes que tuvo Cambiemos en el período anterior.

Cuando era ministro, Frigerio lograba importantes convocatorias.

Ahora, el tablero cambió y la primera señal fue que a lo largo de la semana fueron bajándose poco a poco invitados de peso dentro de la UCR y el cónclave fue perdiendo interés, hasta que las asistencias quedaron reducidas a un pequeño grupo de intendentes y legisladores leales al ex funcionario.

El presidente del bloque de diputados provinciales, Gustavo Cusinato, el diputado nacional, Jorge Lacoste, y el presidente de la UCR provincial, Leandro Arribalzaga, fueron algunos de los que explicitaron ausencias, pero muchos otros lo hicieron por lo bajo.

La UCR y el PRO mantienen Cambiemos en la provincia, aunque con independencia en los espacios que comparten. Definieron sostener el foro de Intendentes –ahora también “y de Legisladores”- de la coalición a nivel provincial y el interbloque en la Cámara de Diputados, con bloques diferenciados en su interior.

La siempre reclamada y nunca oficializada Mesa de Conducción Provincial no funciona y al parecer Frigerio ya no es el elemento unificador que coordinó el mando provincial en los últimos años.

El ex ministro, además, emprendió una disputa a nivel nacional al interior del PRO, aliado al Jefe de Gobierno Porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y siempre de la mano del ex titular de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó, por el liderazgo del partido durante este período de oposición y de cara a las elecciones de 2021 y 2023. Conforman un polo que quiere ser alternativa al de Macri-Marcos Peña-Patricia Bullrich.

Según la fallida convocatoria de Gualeguay para este viernes, Frigerio comenzó su nueva empresa política en Entre Ríos con el pie izquierdo.