El ex intendente habló antes de que el lunes salga la sentencia. Acusó a Bullrich sin nombrarla y aseguró: "se me pidió en las más altas esferas que inculpara para salvar mi conducta” . Dijo que "adversarios políticos intentan destruirme".
E
l histórico juicio que unió las causas Narcoavioneta y Narcomunicipio está en sus horas finales y este viernes los más de 30 procesados tuvieron la oportunidad de decir sus últimas palabras ante el Tribunal Oral Federal de Paraná, que este fin de semana deliberará la sentencia y la dará a conocer, en su adelanto, el lunes antes del mediodía, según lo previsto en las oficinas de calle 25 de Mayo de la capital entrerriana.
La presencia destacada de la jornada fue la del ex intendente Sergio Varisco, quien se sentó por segunda vez ante los jueces Lilia Carnero, Noemí Berros y Roberto López Arango -la primera fue en su ampliación de declaración indagatoria hace unas semanas- y aprovechó para desligarse de su imputación al afirmar que no hay pruebas en su contra y vincular su acusación, y especialmente su debacle en la opinión pública, con maniobras políticas.
“Todo esto fue para mí un verdadero calvario”, sintetizó el ex presidente municipal paranaense y aclaró: "no voy a referirme tanto a la causa porque mis abogados ya
lo hicieron". En cambio, centró su defensa en su historia y presente personal. "Para los que no me conocen, desde los años 80 dediqué mi vida a la
política. Salvo cuando por 4 años entré por concurso al Poder Judicial”, repasó y se jactó de haber renunciado a “cualquier tipo de bien material”.
“No tengo auto, ni propiedad, ni casa. Cuando me quebré la cadera no pedí ART. No tengo cuenta bancaria excepto la cuenta sueldo", remarcó Varisco para limpiar su imagen.
El radical insistió en que "estos más de dos años" tuvo que "sobrellevar la estigmatización porque a uno lo encasillan de
narcotraficante, de narcomunicipio y cualquier mal informado que escuchó una
noticia que no corresponde puede llegar a agredirme”.
“Mis amigos me conocen y saben que soy inocente. No vendí,
ni compré, ni financié droga. No tomo alcohol. Si tengo vicio es cigarrillo y
tengo que dejarlo", advirtió el ex jefe comunal y se refirió a su internación en Capital Federal por problemas cardíacos, a comienzos de este año. "Ocurrieron circunstancias que tienen que ver con el estrés y
nerviosismo. Eso me llevó a un By Pass y que me quiebren la cadera. Pero son
sacrificios que hay que pasar”, admitió.
Desde Buenos Aires
Varisco dedicó un tramo de su exposición a poner en sospechas el interés por la causa narco en el gobierno nacional de Mauricio Macri y los medios de comunicación porteños. Sus abogados defensores ya habían involucrado a la ex ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, en sus alegatos ante el Tribunal a principios de esta semana.
“He visto llorar y soportar cuestiones mediáticas.
Especialmente en Buenos Aires”, indicó Varisco y reconoció su “bronca porque se decía que la avioneta (incautada en 2017 y que dio inicio a la causa Narcoavioneta) estaba
agobiada de empleados y camionetas municipales. O cuando salió que se usaban
vehículos para transportar estupefacientes y acá se demostró que no”.
“Seguro hay adversarios políticos que me intentan destruir”, sentenció el ex intendente.
Varisco aludió a Bullrich pero, a diferencia de sus abogados, lo hizo sin mencionarla. “Cuando se me pidió en las más altas esferas de gobierno que otros se tiraran sobre la granada, e inculpara para salvar mi conducta dije que no. No voy a delatar a nadie por cosas que no hicieron”, señaló. Según su Defensa, la ex funcionaria le había propuesto negociar su absolución a cambio de que "entregue" al ex concejal Pablo Hernández y la ex subsecretaria de Seguridad municipal, Griselda Bordeira, también procesados en la causa Narcomunicipio.
El ex jefe comunal también puso énfasis en la presunta falta de pruebas que confirmen su participación en el financiamiento de la banda narco Celis. “Declaré en contra de
lo que decían mis abogados porque quería dar la cara. Cuando salí de acá, puse
a salvo mi conducta y mi pasado. No tengo antecedentes. No hay escuchas mías
sobre el tema de droga con Celis ni Bordeira ni Hernández”, salvo “4 o 5 escuchas que
me mencionan fueron aquí muy bien explicadas”, afirmó.
“No es cierto lo del acuerdo respecto a la droga. Si es cierto que uno tiene lo bueno de la vieja política. Habrá miles de fotos mías por todo Paraná. Se me imputó por eso. Hay acuerdos tácitos de política", sugirió Varisco.
También negó que durante su gestión se hayan desviado fondos públicos municipales. "Se me acusa de irregularidad. Miren, la administración es sabia en esto, más allá de la lentitud. Acá estuvieron 4 contadores que son de carrera”, refirió en cuanto a testigos que declararon durante el proceso.
“La gente desconoce que me sometí a un examen toxicológico que resultó que nunca en mi vida consumí”, se defendió también el ex intendente y repitió: "mi tranquilidad tiene que ver con que después de dos años de investigación no se encontró droga, sólo los papeles", registró Análisis.
"Después de dos años, de este supuesto financiador no hay prueba cierta que uno haya sacado dinero de la cuenta, haya entregado, nada de lucro”, ratificó Varisco.
“Hay cosas que no pude cumplir. Pero confío en la justicia y en ustedes. Me sometí a la justicia. Y todos saben dónde estuve”, finalizó.
Celis: "Bordeira, Hernández, Varisco no tienen nada que ver"
También hizo uso de este derecho de expresarse el sindicado capo narco del oeste de la ciudad, Daniel "Tavi" Celis, quien se hizo cargo de las acusaciones y desligó a los políticos procesados. "Soy culpable de la causa que reconozco mi delito", admitió ante los jueces.
"Pido perdón a Luciana Lemos por haberla metido en esto. Ella es inocente de la causa", agregó el hombre detenido en la Unidad Penal de la capital provincial y añadió que "Bordeira, Hernández, Varisco no tienen nada que ver".
"Yo necesitaba dinero. El intendente incumplió muchas promesas. Dios se encargará por todo el daño que él causó, pero Varisco nada tiene que ver con la causa", reafirmó Celis, antes de cerrar con el pedido de que "la Justicia sea para todos y todas”.