El ministro encabezó el relanzamiento de campaña en Crespo. Ni siquiera sugirió una victoria de Macri en octubre y pidió “cambiar” para alcanzar la segunda vuelta, pese a la ventaja de Fernández. Mensaje a gobernadores por medidas.
E
l ministro del Interior de la Nación, Rogelio Frigerio, cerró su paso por Entre Ríos de este martes con un acto de "relanzamiento de campaña" de Juntos por el Cambio a nivel provincial, ante candidatos, intendentes, legisladores y dirigentes. Previo al acto político, el funcionario compartió con el intendente local, Darío Schneider, la inauguración de 25 viviendas.
Una vez en la Asociación Deportiva y Cultural donde se congregaron las primeras filas del macrismo entrerriano, en la tarde de este martes, el ministro bajó la línea que los referentes locales deberán seguir durante las próximas semanas de cara a las elecciones generales del 27 de octubre. Frigerio ni se molestó en animar un posible triunfo de Mauricio Macri sobre Alberto Fernández, aunque sí mostró como posible llegar al desempate en noviembre. Para ello, reconoció la necesidad de "cambiar lo que haya que cambiar", tras la contundente derrota del 11 de agosto.
Cambiemos
"Tenemos que responder a las cosas que el pueblo nos reclama y que nos reclamó de una manera muy clara, en el voto del 11 de agosto. A esos mensajes hay que saber leerlos, hay que cambiar en función de esos mensajes y eso es lo que estamos intentando hacer", balanceó Frigerio en Crespo.
"Creemos que el norte al cual apunta la Argentina, es el
correcto; pero por supuesto que si hay que tomar otro camino en otros aspectos
habrá que tomarlos", agregó.
"Hay que escuchar el mensaje de las urnas, cambiar lo que haya que cambiar. Hay que trabajar para llegar al balotaje", sintetizó el ministro.
En vez de fundamentar la posibilidad desde las cifras (Fernández le sacó una ventaja de 15 puntos a Macri en las PASO), el funcionario lo hizo desde la política. "Creo que el balotaje es bueno para la democracia, porque la concentración de poder que se da cuando hay un resultado en primer vuelta, no siempre es óptimo. Balotaje implica paridad entre las fuerzas, que impide que haya una supremacía política y de poder de una fuerza sobre otra, que eso siempre genera una democracia no tan potente", argumentó.
"Que ese equilibrio se de en Diputados, Senadores, a nivel
Congreso, es muy importante. No estamos tan lejos", estimó.
Gobernadores: diálogo, no Justicia
El ministro, principal enlace del gabinete de Macri con los mandatarios provinciales, se refirió a la puja por los recursos con los que se financia el paquete de medidas dispuestas por Nación para paliar los efectos de la devaluación. "Tomamos una decisión ante la reacción de la economía después de la elección. El presidente tomó nota de eso y decidió algunas medidas de emergencia en favor de la gente, medidas que todos apoyan y que de hecho, están en la plataforma que la oposición", defendió.
Según registró Estación Plus, Frigerio entendió que el malestar con gobernadores por el impacto fiscal del pack "tenemos que sentarnos y resolverlo desde el diálogo. No creo que la justicia sea el lugar. Apuesto al diálogo, si no fue antes, puede ser después de la medida, porque fue de emergencia".
"Por supuesto que no tuvimos tiempo de consensuar con todo el arco opositor. Si estas medidas tienen un impacto tal en las finanzas provinciales que ponen en riesgo el cumplimiento de las obligaciones indelegables de las provincias y los municipios, nos vamos a sentar con todos", explicó el ministro, pero sentenció: "Nadie puede creer que las medidas sean algo que haya que revertir”.
Federalismo
Por otro lado, el ministro y líder de JxC en Entre Ríos trazó uno de los ejes de campaña para remontar los 77 mil votos que Fernández le sacó a Macri en la provincia. "Nunca ocurrió una participación de las provincias en casi un 50%, como ahora. Eso es federalismo. Las 17 provincias que estaban con déficit fiscal cuando asumimos, hoy tienen superávit", resaltó.
"Eso ha sido decisión del gobierno nacional de transferirles
a las Provincias los recursos que les corresponden por derecho y también fruto
de la responsabilidad de control fiscal de las Provincias, que ha sido otro
logro en conjunto", añadió.
"En diciembre de 2015, cuando asumimos, Entre Ríos estaba quebrada, no podía pagar sueldos y el aguinaldo de fin de año y nosotros aún también en una crisis tremenda, con un Estado que heredamos quebrado, pudimos rascar en el fondo de la olla y ayudar a los entrerrianos, a los empleados públicos de Entre Ríos. Lo hicimos durante gran parte de estos 4 años de gestión y lo vamos a seguir haciendo", definió Frigerio.